"Buenas tardes, hoy día ha perdido el país". Con estas palabras y sin preámbulo alguno el ministro de Educación, Harald Beyer, inició la conferencia de prensa post acusación constitucional que aprobó la Cámara de Diputados en su contra, lo que supone suspender de sus funciones al secretario de Estado.
Visiblemente molesto, Beyer aseguró ser el primer ministro que ha fiscalizado "con ahínco" y controlado el lucro en la Educación, elevando además la capacidad de supervisión del Estado.
Recordó que se han enviado los proyectos necesarios para aumentar la calidad de la educación superior y fiscalizar mejor a estas instituciones. Recordó además que bajo su gestión en la cartera se han pasado de 118.000 becas a 401.000 en 2014.
"Estamos cambiando el rostro de la educación superior chilena y esta acusación lo único que hace es detener ese esfuerzo; lo que busca es mostrar la peor cara de la política", dijo el seecretario de Estado.
"Me siento víctima de una campaña política del peor nivel", agregó la autoridad, quien estuvo respaldado por ministros de Estado y parlamentarios oficialistas.