El ministro de Hacienda, Nicolás Eyzaguirre, se refirió escuetamente a la renuncia de Paul Romer, economista jefe del Banco Mundial vinculado con el escándalo sobre la presunta manipulación del ránking Doing Business por razones políticas.
"Es una decisión enteramente personal, no sé si su renuncia está vinculada o no con Chile", dijo el ministro evitando evaluar la decisión de Romer al tiempo que afirmó que su salida es "un asunto interno" del BM.
Consultado sobre si con la renuncia el gobierno de Chile da por superada la situación, afirmó que "siento que ha estado superada, no obstante que el banco se ha comprometido hacer una auditoría".
"Fue una polémica que nosotros jamás buscamos", aseveró la autoridad.
"Nosotros presentamos nuestra molestia, pero afortunadamente el Banco reaccionó muy favorablemente, por cuanto se comprometió a cambiar la metodología en el sentido de lo que es necesario para que no se produzcan las subas y bajas de los países de un año para otro que nadie entiende", puntualizó.
Insistió en que Romer en sus evaluaciones "se apoyó en la volatilidad que mostraba la suba y baja de Chile, pero después fue más allá e imputó intencionalidad" y añadió: "Nosotros como gobierno jamás imputamos intencionalidad, sí expresamos la molestia. Sí nos parecía que el fondo del asunto es que el país no se torna más competitivo de un año para otro y viceversa, era un punto y lo hicimos presente", agregó.
Así, consideró como una "victoria diplomática" la decisión del Banco Mundial de un cambio metodológico.