Por A. Chávez
Cuando el centro de atención era el diputado Fidel Espinoza (PS), a quien se acusaba de haber utilizado el tema de las asignaciones del Senado, para saldar una “cuenta política” con el senador Camilo Escalona (PS), la polémica dio ayer un giro sorpresivo.
De hecho, la discusión se convirtió en una disputa entre ambas corporaciones. Debido a que fue inicialmente el presidente de la Cámara Baja, Nicolás Monckeberg (RN), quien exigió explicaciones a su par del Senado ante la información que había llegado a sus manos el martes en la mañana y que puso en conocimiento de los jefes de bancadas.
Así, mientras pesaba sobre los senadores las duras críticas de la opinión pública y se intentaba explicar cómo se generó la polémica asignación de $ 2 millones para cada uno y para gastos operacionales, fue el titular de la Cámara Alta, el senador Escalona quien a nombre de toda la corporación leyó una declaración pública en la que subraya que tal asignación fue en virtud de una decisión autónoma del “Consejo Resolutivo de Asignaciones Parlamentarias”, organismo creado por ley y que también benefició a los diputados.
No obstante, el mismo Monckeberg retrucó señalando que “algunos senadores están confundiendo las cosas, nosotros hemos actuado en estricto apego a una resolución que se adoptó en septiembre que hizo cambios en todas las asignaciones de los diputados y senadores, equiparó ciertas y rebajó algunas, y subió otras y nosotros hemos actuado en estricto apego a eso”.