“Estamos bien instalados, cómodos y contentos acá”, señaló el candidato presidencial José Antonio Kast, desde el patio de la casona de Presidente Errázuriz en Las Condes que alberga a su comando, dando luces de lo que será eventualmente la tradicional “Moneda chica”, como se le conoce al centro de operaciones de quien gana la elección presidencial y que, por tres meses, antes de asumir el Gobierno el 11 de marzo del año próximo se transforma en el epicentro noticioso del gobierno entrante.
Pero esa es solo una de las definiciones que deberá tomar el candidato opositor de cara al diseño del plan de trabajo desde el “día uno” como mandatario electo si vence este domingo a Jeannette Jara y que comprende desde el 15 de diciembre y hasta el 10 de marzo de 2026, previo al inicio de las actividades oficiales de cambio de mando.
Aunque el discurso oficial de Kast y sus asesores más cercanos es primero “ganar la elección”, ya está avanzado el diseño de trabajo, en el cual han tenido una destacada participación su asesor principal, Cristián Valenzuela; el presidente de Republicanos, Arturo Squella; el jefe de campaña, Martín Arrau; y la secretaria general de Republicanos, Ruth Hurtado.
El abanderado adelantó que “tengo claro que si ganamos vamos a comenzar a trabajar desde el día 15 de diciembre, no como Presidente, sí como mandatario electo, pero con la actitud con la que uno asume en ese período largo, porque es muy largo de diciembre a marzo”.
Agregó que “nosotros ya vamos a tener muchas cosas avanzadas si me toca jurar el día 11 de marzo” y respecto al denominado plan Desafío 90 para los primeros tres meses dijo que “está bastante avanzado y desarrollado”, un plan en el que trabaja el economista Bernardo Fontaine y que consiste en una serie de medidas administrativas y proyectos de ley de un artículo para facilitar su trámite en el Congreso.
Primeras instalaciones
En el comando de Kast señalan que una de las alternativas es instalar la primera semana una suerte de comité político con los timoneles de las colectividades que se sumaron a la campaña luego de la segunda vuelta. La idea es comenzar a diseñar y conversar equipos de trabajo para el nuevo Gobierno y también la estrategia de coordinación legislativa.
En paralelo hay otro equipo encargado de identificar potenciales candidatos para los casi tres mil puestos de confianza que debe nombrar el gobierno entrante. En esa labor está un grupo encabezado por el coordinador general de la campaña, Alejandro Irarrázaval, y el exconsejero constitucional, Sebastián Figueroa. A ellos se suman la directora de Ideas Republicanas, Carmen Soza, y el jefe del área económica, Jorge Quiroz.
Respecto a la conformación del gabinete entrante, aunque en reiteradas oportunidades el ex diputado ha señalado sobre nombramientos que “primero hay que ganar la elección y eso lo conversaremos desde el lunes” 15 de diciembre, ya han trascendido nombres para el equipo ministerial, como Mara Sedini como ministra vocera; Martín Arrau en Obras Públicas; Claudio Alvarado en Segpres; el arquitecto Iván Poduje como biministro en Vivienda y Bienes Nacionales; y otros sin destino claro hasta ahora como el e alcalde Puente Alto, Germán Codina, y Bernardo Fontaine, que podría ser ministro o asesor del llamado segundo piso.
También podría haber un triministro en Economía, Minería y Energía, donde suena el nombre del abogado Rodrigo Álvarez (UDI), quien fue diputado y también ministro de Energía y subsecretario de Hacienda del primer mandato de Sebastián Piñera.
Un integrante del equipo de Kast de campaña señaló que la idea del republicano es “dar pronto una señal a los mercados” nombrando a parte de su equipo económico, especialmente a su ministro de Hacienda, aunque insisten en que “primero debemos ganar la elección”.
A todos los nombres anteriores se les deben sumar los candidatos a ministros que propongan desde Chile Vamos, Demócratas y Amarillos para dar forma al llamado “gobierno de unidad” que pretende llevar adelante Kast.