La persecutora valoró "el hecho de haber convencido a una magistrada (Carolina Paredes, que emitió una sentencia dirimente) de que aquí se rindió prueba suficiente" y enfatizó que "nos llama profundamente la atención que en el voto de mayoría las magistradas no se hacen cargo, al menos por ahora, habrá que revisar la sentencia, de la prueba rendida para estimar por qué no resultó creíble para ellas", esto, en particular sobre los delitos tributarios.
Desestimó que ser fiscal regional este caso les haya jugado en contra, sino que enfrentaron más bien "la dificultad propia de llevar una causa con mucha información, con muchos antecedentes, encontrarnos en Valparaíso, tener que viajar a Santiago, pero como ustedes verán hoy en día eso sigue ocurriendo. Las causas de connotación suelen ser entregadas por un fiscal nacional a un fiscal regional y eso no es un error, es una manera de relevar la gravedad de ciertas investigaciones".
¿Y qué va a pasar con las costas? "No hemos sido íntegramente vencidos,entonces no hay posibilidad de que nos condenen en costas".
Una opción es pedir la nulidad del juicio lo cual, a su juicio, "es un análisis que hay que realizar una vez que tengamos el texto definitivo de la sentencia", el que se conocerá el 5 de agosto de 2026.
Según Marcos Enrique Ominami, este proceso costó unos $ 5 mil millones.