Mientras Andrónico Luksic hace noticia en Chile por las agresiones sufridas a la salida del Centro de Justicia, en España el apellido acapara títulos de la prensa económica por un nuevo negocio.
Según El Confidencial, la familia más rica de Chile se quedó con el emblemático Hotel Adler de cinco estrellas, el cual está ubicado en una de las esquinas más importantes de Madrid (Velázquez y Goya), específicamente en el barrio Salamanca.
De acuerdo a la publicación, se trata de uno de los establecimientos con más abolengo de Madrid, famoso por su restaurante, Nimú Bistró, y por su máxima discreción, virtud que lo llevó a albergar a algunos de los empresarios y políticos más importantes del país.
El lugar era administrado por la familia Vázquez y el próximo domingo terminará de desprenderse de toda la plantilla, contratos que en muchos casos suman más de una década de antigüedad, revela el medio hispano.
La operación comenzó hace cuatro años. En diciembre de 2012, la familia Luksic se hizo con la suite presidencial del hotel al adquirir el inmueble que lo alberga por cerca de 27 millones de euros.
Sin embargo, la familia Vázquez se reservó un derecho de compra durante cinco años y la gestión del hotel durante el mismo periodo, pacto que conllevó que, en un primer momento, solo percibiera por esta operación un beneficio de 8,4 millones de euros.
Durante los dos años siguientes, se tramitó un plan especial para cambiar el uso del inmueble a comercial y oficinas.
En diciembre de 2015, la familia Vázquez declinó ejercer su opción de compra con dos años de antelación y la vendió por 19 millones de euros, “en virtud del contrato firmado con Topland Investments”, la cual está ligada a una sociedad denominada Sandypoint, controlada por los Luksic.
El negocio hotelero e inmobiliario no es nuevo para el grupo. Davor Luksic Lederer, hijo de Andrónico, es el integrante de la familia que está al mando de esa área y se estima que maneja un patrimonio de unos
US$ 800 millones.