En el año 2003 Marc Lesouhaitier y Joel Beroud, dos franceses amigos desde la época universitaria, fundaron la panadería y pastelería La Chocolatine en Vitacura.
A pesar del prestigio que fue adquiriendo esta típica panadería francesa, su marca fue rechazada por el Instituto Nacional de Propiedad Industrial (INAPI), el cual consideró que era descriptiva y no tenía distintividad, por cuanto “Chocolatine” es el nombre que toma el pan de chocolate en el sur de Francia.
Sin embargo, el pasado 8 de agosto el Tribunal de Propiedad Industrial revocó la resolución de INAPI y concedió la marca, considerando que el signo “La Chocolatine” había adquirido distintividad mediante su uso en el mercado nacional.
Esta figura, también denominada “distintividad sobrevenida”, fue incorporada a la legislación local en el año 2005 y permite obtener el registro de marcas que no obstante poseen un significado originario descriptivo, debido a su uso relevante en el mercado, se han convertido en signos que indican de forma inequívoca la fuente empresarial de los productos o servicios.
En este pleito, la pastelería estuvo representada por por Cristián Mir y Yair Riquelme de Puga Ortiz Abogados.