Legisladores estadounidenses descargaron hoy su artillería pesada contra el director
ejecutivo de la petrolera británica BP, Tony Hayward, a quien acusaron de
dirigir una empresa en la que prima la rentabilidad sobre la seguridad, durante
una audiencia sobre el derrame en el Golfo de México.
"BP tiene una historia de optar por la vía más sencilla en nombre del
todopoderoso dólar", afirmó el legislador demócrata John Dingell durante
la audiencia celebrada hoy en el Comité de Energía y Comercio de la Cámara de
Representantes.
Hayward, que compareció por primera vez en el Congreso de EE.UU. desde el
inicio del derrame de crudo en el Golfo de México, a finales de abril, se
escudó con frecuencia en el "hay una investigación en marcha" para
evadir las críticas a las que lo sometieron los legisladores.
Los congresistas coincidieron de forma casi unánime en que BP tomó decisiones
"arriesgadas" en el diseño del pozo e ignoró las señales de
advertencia que precedieron al accidente.
La única tregua de la que disfrutó Hayward llegó al inicio de la audiencia,
cuando el presidente del Comité de Energía y Comercio de la Cámara de Representantes,
Henry Waxman, celebró la decisión de BP de crear un fondo para compensar a los
afectados por el derrame.