El Tribunal de Gran Instancia de París condenó hoy a Google por digitalizar
extractos de libros sin el consentimiento de los editores y le impuso una multa
de US$ 428.340 en concepto de daños y perjuicios.
El fallo de este tribunal prohíbe al popular buscador estadounidense que siga
escaneando textos sin autorización y le obliga a pagar esa cantidad a los
editores afectados que le denunciaron, del grupo editorial francés La Martinière.
Google Francia ya ha anunciado su intención de recurrir una
decisión que considera perjudicial para el público.
"Estamos en desacuerdo con la decisión del juez y apelaremos la sentencia.
Los lectores franceses se enfrentan ahora a la amenaza de perder el acceso a
una gran cantidad de conocimientos y colocarse con ello a la zaga del resto de
usuarios de Internet", señala el comunicado difundido por el grupo.
El gigante estadounidense mantiene que "mostrar un número limitado de
breves extractos de los libros cumple con la legislación de derechos de autor,
tanto en Francia como en los Estados Unidos".