PSA Group, que fabrica las marcas Peugeot, Citroën y DS, publicó ayer resultados de pruebas que confirman que el rendimiento del combustible por kilometraje de sus autos en la calle es menor que en el laboratorio.
Los catorce modelos de Peugeot probados usaron, en promedio, un 44% más de combustible en la vida real de lo que dicen sus especificaciones, mientras que en el caso de once autos de Citroën el consumo fue un 39% más alto, según los datos. Tres autos de la marca premium DS usaron en promedio un 40% más de combustible que lo promocionado.
Las pruebas se realizaron en vías públicas con pasajeros, equipaje y control de clima. Los autos recorrieron entre 25,5 kilómetros y 35,7 kilómetros. Los test se realizaron para cada modelo con dos conductores diferentes.
El modelo crossover compacto 3008 de Peugeot, a gasolina, fue el que presentó la mayor brecha entre los resultados en el laboratorio y la vida real, consumiendo 7,6 litros de gasolina por 100 kilómetros en las pruebas en ruta. Eso se compara con 4,9 litros por 100 kilómetros según el Nuevo Ciclo de Conducción Europeo, el procedimiento de pruebas estandarizado en la Unión Europea.
Esta disparidad no sólo impacta los bolsillos de los conductores, sino que también es una medida de cuánta polución adicional emite un auto al quemar más gasolina o diésel por kilómetro recorrido.
Crisis en la industria
Las pruebas, que se realizaron en conjunto con grupos medioambientales y fueron auditadas por Bureau Veritas, son un esfuerzo de PSA por impulsar la confianza de los consumidores a la luz del escándalo de emisiones de Volkswagen.
La automotriz alemana admitió en septiembre que instaló un software para hacer trampa en las pruebas de polución en cerca de 11 millones de autos diésel en todo el mundo, incluyendo 8,5 millones en Europa.
Como parte de este esfuerzo de transparencia, PSA se comprometió ayer a entregar cifras de emisiones en la vida real para otros 20 modelos más para fines de este año, además de ofrecer un simulador de consumo de combustible online en base al estilo de conducción y las condiciones de la ruta.