El Departamento del Tesoro de EE.UU. calificó hoy de
sacrificio necesario la petición de Chrysler de eliminar un 25% de sus 3.200
concesionarios en el país y dijo que la medida añadirá estabilidad laboral al
fabricante.
Hoy, Chrysler solicitó al juez de Nueva York que supervisa
su suspensión de pagos, Anthony González, que permita la cancelación de los
contratos firmados por la empresa con 789 concesionarios "para conservar
dinero" y concentrarse en aquellos que son más rentables.
"Con enorme tristeza debemos tomar las medidas para
finalizar algunos de nuestros acuerdos", afirmó Steven Landry,
vicepresidente ejecutivo de Chrysler para Ventas y Mercadotecnia en
Norteamérica.
Landry dijo que esos 789 concesionarios representan el 14%
del volumen de ventas de la empresa.
El Departamento del Tesoro afirmó, en un comunicado, que
entiende "que esta racionalización será difícil para los concesionarios
que dejarán de vender automóviles de Chrysler y para las comunidades en las que
operan".
"Sin embargo, los sacrificios de la comunidad de
concesionarios (junto con los de trabajadores, proveedores, acreedores y otras
partes interesadas), son necesarios para que esta compañía y el sector tengan
éxito", añadió el Departamento del Tesoro.