El primer
ministro de Italia, Silvio Berlusconi, fue hoy herido en Milán, tras sufrir una
agresión al término de un mitin celebrado en la plaza del Duomo, y tuvo que ser
ingresado en un hospital sangrando por la boca.
Inmediatamente
después de la agresión, el mandatario fue trasladado en su vehículo oficial al
hospital San Raffaele de la capital lombarda, donde los
médicos decidieron mantenerle durante 24 horas bajo observación, tras lo que se
prevé un tiempo de recuperación de 20 días.
Berlusconi,
que en todo momento estuvo consciente y que al salir de urgencias con una bolsa
de hielo en la boca para ser trasladado a una habitación del centro médico dijo
encontrarse bien, presenta, según el diagnóstico de los médicos, una pérdida
copiosa de sangre, una lesión lacero-contusa interna y externa en el labio
superior, así como daños en los dientes y una fractura en el tabique nasal.
Tras el
suceso, que se produjo poco después de las 17.30 GMT al acercarse Berlusconi a
saludar a la gente tras el mitin, la
Policía detuvo al supuesto agresor, que, según fuentes
policiales, es un hombre de 42 años sin antecedentes penales de nombre Massimo
Tartaglia.
Agentes de la Policía, que descartan que
el incidente tenga vínculos con algún grupo de extremismo organizado,
condujeron al detenido a la comisaría para el interrogatorio y, según fuentes
de la investigación, se encuentra en tratamiento psicológico desde hace diez
años en un hospital de Milán.
Los hechos
se produjeron al bajar Berlusconi del estrado del mitin de su partido político,
el gobernante Pueblo de la
Libertad (PDL), retransmitido en directo por la televisión, y
acercarse a saludar a la gente, donde el agresor aprovechó para golpearle con
un objeto contundente.