Una inesperada
caída experimentó la confianza de los consumidores de Estados Unidos durante diciembre, según el
informe de la Conference Board. Los analistas
esperaban que el índice subiera a máximos desde junio pasado.
El índice cayó hasta los 52,5 puntos en el último mes del año, desde los 54,1 puntos anotados en noviembre.
La media de las expectativas de los expertos se ubicaba en torno a los 56 puntos, lo que hubiera supuesto despedir el año en el mejor nivel desde junio.
Sin embargo, la realidad del mercado laboral, con la preocupación por
la posible pérdida de empleo entre los estadounidenses, sigue lastrando
la confianza del consumidor. Así lo reconoce el director del informe de
la Conference Board, Lynn Franco, quien apunta que "los consumidores
siguen evaluando el estado actual de la economía y el mercado laboral de
forma tibia por lo que sus perspectivas siguen siendo cautas".