Más de un millón de manifestantes se han tomado las calles de
Francia en una segunda ronda de huelgas y manifestaciones
convocadas para denunciar la gestión de la crisis económica por parte
del presidente Nicolas Sarkozy.
La principal crítica que se le ha hecho al mandatario galo es que ha inyectado miles de millones
de euros en paquetes de rescate para bancos y automotrices, sin embargo se ha
negado a contemplar las demandas sindicales de alzas salariales o
protección del empleo.
La huelga nacional ya he traído consigo varios disturbios y problemas en los servicios básicos de electricidad, y transporte. En ese sentido, se confirmó la cancelación de más del 30% de los vuelos programados para hoy desde los aeropuerto de Orly y Charles de Gaulle. Asimismo, la compañía nacional de ferrocarril, (SNCF) se mantiene paralizada en un 40% de su servicio.
Durante la jornada se esperan más de 200 manifestaciones a lo largo de las ciudades francesas, con un cálculo de 2 millones de personas, según cifras de los sindicatos.
El 29 de enero pasado, otra protesta similar ocurrió en Francia, oportunidad en que los
sindicatos consiguieron sacar a la calle a más de un millón de personas, pero no paralizaron el país, en parte
por el buen funcionamiento de los transportes públicos. Con todo, las
manifestaciones constituyeron un éxito.