El Gobierno francés revisó a la baja sus expectativas
económicas para este año y reconoció que el Producto Interno Bruto (PIB) caerá
un 1,5%, con lo que se acerca a las cifras esperadas por la Comisión Europea
y el Fondo Monetario Internacional (FMI), que sitúan la bajada próxima al 2%.
El Ejecutivo francés anunció las nuevas cifras, que figuran
en la versión corregida del Presupuesto del Estado, que vienen a sustituir las
que había mantenido desde el pasado otoño, cuando auguró una progresión del PIB
de entre el 0,2 y el 0,5%.
La recesión de este ejercicio se traducirá en la destrucción
de entre 320.000 y 350.000 empleos, en la línea de los 89.000 que
desaparecieron en el cuarto trimestre de 2008, precisó el Ministerio de
Economía y Finanzas.
Otro de los efectos será la escalada del déficit público,
que debería superar los 100.000 millones de euros (unos US$ 128.000 millones) y
representar un 5,5% del PIB.
El departamento de Economía y Finanzas insistió en que
después de un primer trimestre de 2009 que "seguirá siendo muy malo",
a imagen del último del pasado ejercicio (el PIB descendió un 1,2), se tocará
fondo durante la primavera y luego "la normalización debería ser
progresiva".