Italia lanzó hoy un plan de infraestructuras con un
presupuesto de casi 18.000 millones de euros (unos US$ 22.600 millones), en el
que el proyecto estrella es la construcción de un puente en el estrecho de
Messina, entre Sicilia y la península, informa la prensa italiana.
El plan destina los primeros 1.300 millones de euros (US$
1.638 millones) del proyecto del puente sobre el estrecho, que según los
cálculos del Gobierno costará 6.100 millones de euros (US$ 7.686 millones).
El proyecto del puente entre Sicilia y la región sueña de
Calabria es uno de los proyectos fetiche del primer ministro, Silvio
Berlusconi, que lo ha recuperado ahora después de que el anterior Gobierno de
centro-izquierda lo desechase y él mismo no pudiera llevarlo a cabo durante su
anterior legislatura.
En las primeras fases del proyecto, en el anterior Gobierno
de Berlusconi (2001-2006), la obra fue adjudicada a la empresa italiana
Impregilo, al frente de un consorcio del que también formaba parte con el 18,7%
la española Sacyr-Vallehermoso.
El presidente del Senado, Renato Schifani, comentó que el
puente es "un proyecto estratégico para todo el sur del país".
La mayor parte del presupuesto aprobado hoy, 16.600 millones
de euros (US$ 20.900 millones), se destinará a obras de infraestructuras ya
anunciadas, una cifra a la que se añadirán 1.200 millones de euros (US$ 1.512
millones) para la construcción de escuelas y cárceles.
Entre los proyectos seleccionados para ser financiados con
este presupuesto estará la ampliación de la autopista entre Salerno y Reggio
Calabria, en el sur del país, a la que se destinarán 2.000 millones de euros.