Los trabajadores petroleros de Tierra del Fuego mantenían ayer, y por tiempo indeterminado, cerradas las principales válvulas de los caños que inyectan gas al sistema nacional, en protesta contra el alza de tarifas y ante la falta de un acuerdo salarial.
La medida de fuerza, que podría afectar la provisión de gas natural a gran parte de Argentina en las próximas horas, era llevada adelante por los operarios afiliados al Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Tierra del Fuego.
El Sindicato del Personal Jerárquico y Profesional del Petróleo, Gas y Biocombustibles Privado de Tierra del Fuego, Antártida e Islas de Atlántico Sur realizaba un apoyo logístico manteniendo sólo guardias mínimas en los gasoductos por cuestiones de seguridad.
El secretario gremial de los jerárquicos, Moisés de la Cruz Solorza, dijo que la medida fue lanzada por tiempo indeterminado y que en las siguientes horas se definirían los pasos a seguir en la protesta.
“Los secretarios generales se reunirán para determinar si la protesta continuará este jueves o qué se hará”, respondió Solorza al ser consultado sobre cómo seguirá el conflicto que tiene dos aristas: aumento salarial y protesta contra la subida de tarifas de hasta el 2.000% en la Patagonia.
Los trabajadores decidieron cerrar válvulas de caños troncales del Gasoducto Fueguino, que abastece del combustible a toda la isla y es operado por la empresa Camuzzi, firma con la que también están en conflicto salarial.
El martes, el Ministerio de Energía había pedido a las principales industria del país “reducir a cero en el menor tiempo posible” el consumo de gas para garantizar ese fluido a los hogares, hasta que se resuelvan problemas coyunturales de importación de GNL y se levante laa huelga.