La última sesión del año en la Bolsa de Tokio siguió la
tendencia alcista de los principales indicadores internacionales. Sin
embargo, estas ganancias puntuales no sirven para olvidar este 2008, el peor
año de la historia en la segunda bolsa del mundo.
El índice Nikkei subió un 1,30%, pero ha sellado el año de
su historia con pérdidas del 42%. Las principales plazas del continente
asiático comparten este nefasto balance anual, con la bolsa vietnamita como la
que peor se ha comportado en 2008, seguida de las bolsas chinas.
El índice Nikkei se ha anotado 112,39 puntos en su última
sesión del año, o un 1,28%, hasta los 8.859,56 enteros, mientras el indicador
Topix, ha subido 4,47 puntos, o un 0,52%, hasta las 859,24 unidades. La bolsa
nipona acumula cuatro sesiones consecutivas de alzas y consigue cerrar el año
por encima de la barrera de los 8.800 puntos, por primera vez desde el 11 de
noviembre. No obstante, el índice Nikkei ha cerrado hoy el peor ejercicio de su
historia, con una pérdida acumulada del 42,12% o 6.448,22 puntos.
Desde una perspectiva histórica, en 58 años de mercado
bursátil nipón, que había marcado al final de 1989 su récord anual con casi
39.000 puntos, no se ha visto nada parecido. El batacazo porcentual ha sido
mayor que el descenso del 38,7% registrado en 1990, con el estallido de la
burbuja financiera nipona, y de la caída del 27% ocurrida en 2000.
Las bolsas chinas no se han empapado de estas ganancias de
última hora y han cerrado su séptima jornada de pérdidas. El indicador CSI 300 perdió
un 1,2% y acumula una caída anual de un 66%, a la espera de la negociación de
mañana. La evolución de las bolsas del gigante asiático ha sido nefasta, aunque
los inversores han conseguido recuperar en los dos últimos meses buena parte
del terreno perdido a partir de que el Gobierno anunciara el mayor recorte de
tipos de interés de la historia.
Exportadoras a la baja
La región asiática se ha visto perjudicada por el deterioro
de la economía global, que afecta especialmente a las empresas exportadoras.
Las compañías automovilísticas y los gigantes de la electrónica han presionado
a la baja al indicador Nikkei, sufriendo en bolsa las consecuencias de la
apreciación del yen.
Toyota, primera empresa de Japón, se ha dejado un 50% de su
valor bursátil en un año en que, por primera vez desde la década de los 40, ha anunciado que tendrá
pérdidas en su beneficio por operaciones, su actividad ordinaria. Peor todavía
ha sido el comportamiento de los títulos de Sony, que han perdido casi un 70%
de su valor bursátil en 2008, y de los del primer banco japonés, Mitsubishi
UFJ, que han cedido cerca del 50%.
Compra deuda
El
Gobierno y el Banco Central de Japón están planteándose un programa de
unos US$ 110.000 millones para comprar préstamos en mora y otros
activos financieros a los bancos, según informa el diario 'Sankei
Shimbun'.
Las autoridades niponas esperan implementar el programa para
finales de marzo, comprando varios tipos de activos a los bancos,
incluyendo créditos morosos, deuda empresarial, acciones, papeles
comerciales y derivados financieros, dijo el diario, sin citar fuentes.
Podrían adquirir hasta 10 billones de yenes (US$ 110.300 millones) de esos activos bajo el plan, dijo el Sankei, el menor de los
cinco principales diarios japoneses con circulación nacional.