La Bolsa de Santiago abrió a la baja este viernes, tal como se encontraban los mercados bursátiles y sus derivados a lo largo del mundo, ante los problemas de visibilidad que dejó el cierre del Gobierno estadounidense y la posibilidad de que la Reserva Federal no alivie los créditos en su última reunión del año.
El S&P IPSA caía 0,5% hasta los 9.669,69 puntos en las primeras transacciones, después de perder ayer casi 2% desde sus máximos, en medio de una ola generalizada de ventas. El IPSA venía de un intenso rally con miras a las elecciones del domingo, para las que se espera un triunfo de la actual oposición.
Los futuros del Nasdaq retrocedían 1,4%, los del S&P 500 0,9% y los del Dow Jones 0,5% en el mercado derivado. En Europa, el FTSE 100 de Londres caía 2% y el continental Euro Stoxx 50 1,8%.
Asia cerró con pérdidas este viernes, en línea con la mala sesión de las bolsas occidentales ayer. El hongkonés Hang Seng bajó 1,9%, el Nikkei japonés 1,8% y el CSI 300 de China continental 1,6%. Las ventas se profundizaron tras débilas cifras de producción industrial, ventas minoristas y sector inmobiliario en China.
"Ha aumentado la preocupación de que, si bien el cierre del Gobierno terminó, la falta de datos económicos que dejó a la Reserva Federal actuando a ciegas podría no reaparecer antes de su reunión de diciembre. Por lo tanto, los inversionistas consideraron que la Fed podría decidir ir sobre seguro y mantener las tasas hasta que se restablezca la visibilidad total", repasó el head de mercados en Interactive Investor, Richard Hunter.
En esto ha contribuido también el hecho de que varios miembros de la Fed se han mostrado abiertos a que la política monetaria siga restrictiva. Los operadores están divididos prácticamente en partes iguales sobre la posibilidad de un recorte en dicimebre, según los precios de mercado.
Hunter también reparó en que "últimamente los inversionistas se han mostrado inquietos ante el gasto excesivo en IA, cuyo éxito no se verá reflejado hasta dentro de algún tiempo, y las valoraciones infladas que han dado lugar al implacable interés comprador".