Las bolsas de Estados Unidos y del resto del mundo occidental subían este viernes, alentadas por cifras de inflación que no obstruyen la campaña de alivio monetario de la Reserva Federal.
El Dow Jones subía 0,6%, el S&P 500 aumentaba 0,4% y el Nasdaq crecía 0,3% en los primeros negocios de Wall Street, que así se recupera de una tercera jornada alejándose de sus máximos históricos.
Mientras, el S&P IPSA chileno reaccionaba a la par, subiendo 0,3% hasta los 9.065,51 puntos. Las acciones de Latam (2,4%) exhibían el mejor retorno de la bolsa y daban un respaldo al IPSA, tras cerrar una sesión para el olvido.
En Europa, el continental Euro Stoxx 50 avanzaba 0,9% y el FTSE 100 de Londres ganaba 0,6%, desempeños que a ambos índices les permitirían cerrar la semana ligeramente en alza.
Los datos de Consumo en Gasto Personal (PCE, sigla en inglés) están dando un respiro a los mercados. El deflactor de precios subyacente -que la Fed mira de cerca- subió 0,2% mensual en agosto, sin sorpresas, y desde una serie de julio revisada a la baja en una décima.
Esto confirma lo que ya estaba descontando en los rendimientos del Tesoro y los derivados de tasas: la Fed podrá recortar su tipo oficial una y posiblemente dos veces más en lo que queda del año.
Las principales bolsas asiáticas siguieron hoy el rastro de las plazas occidentales. El hongkonés Hang Seng perdió 1,4% este viernes y 1,6% a nivel semanal, mientras que el CSI 300 de China continental se redujo 1%, pero subió 1,1% en cinco días, y el Nikkei de la bolsa de Tokio retrocedió 0,9%, aunque subió 0,7% en la semana.
Los desempeños de Asia se vieron perjudicados también por los nuevos anuncios arancelarios de Donald Trump. El presidente de EEUU anunció que a partir del próximo 1 de octubre se impondrán aranceles de 100% a los medicamentos patentados y de marca, 50% a los muebles de cocina y baño, 30% a sofás y muebles similares importados y 25% a los cambios de carga.