Está pasando de todo en el mercado de dólares. No sólo Chile está viendo un intercambio de divisas cada vez más ajetreado, sino que también se ha producido un quiebre entre la demanda de agentes extranjeros y la de instituciones locales.
La posición neta de US$ 5.675 millones contra el peso chileno es la más agresiva que han hecho los no residentes desde fines de enero de este año, según los datos al martes que publicó esta mañana el Banco Central, en un registro que compila contratos de derivados firmados con bancos del país.
El tipo de cambio no ha reflejado esta tendencia. De hecho, mientras desde el 24 de octubre las posiciones especulativas contra el peso empezaron a escalar desde los US$ 1.000 millones, el dólar ha caído más de $ 20 para registrar su menor precio desde marzo.
Tasas y variedades
"Es posible que los no residentes estén apostando por un peso débil en medio de las próximas reuniones de política monetaria del Banco Central y la Reserva Federal, el ajustado diferencial de tasas de interés y el cierre del trade político, que ya estaría casi completamente incorporado en los precios", dijo a DF el economista jefe de Credicorp Capital Chile, Samuel Carrasco.
"Por otra parte, esta presión depreciativa podría estar siendo contrarrestada por inversionistas locales, que se muestran algo más optimistas con la moneda, impulsados por el mayor precio del cobre, mejores perspectivas de crecimiento y un escenario político favorable", complementó.
Es un mercado revuelto, donde los montos transados han subido aceleradamente en medio de múltiples flujos de cobertura ante las contingencias internacionales relacionadas con la política monetaria, entre otros factores.
"Esta divergencia entre la posición off shore y el valor del peso es bastante común en el corto plazo. Factores como el carry trade, rebalanceos y montos relevantes transados de derivados en dólar-peso generan divergencias que tienden a converger en el mediano plazo, alineándose con lo que sugieren los fundamentos", dijo el gerente de moneda extranjera en LarrainVial Corredora de Bolsa, Matías Urrutia.
Según el ejecutivo, los fundamentos económicos tales como términos de intercambio -a grandes rasgos, precio del cobre versus precio del petróleo- y diferenciales de tasas de interés sustentan un peso más fuerte frente al dólar.
Jorge Concha, FX trader de la mesa de dinero Sales & Trading del Banco Bci, consideró que "probablemente el flujo no residente ve mejores rendimientos en renta variable, aprovechando los rallies alcistas por las expectativas de reducción de tasas".
Por otro lado, estimó: "Lo que está influyendo más en el precio es la mejora de expectativas económicas en Chile por cambio de coalición de Gobierno y, por sobre todo, el nivel histórico del cobre producto de la restricción de oferta futura e incluso el impacto de posibles aranceles el próximo año".
Según el junior market analyst de Ebury, Diego Barnuevo, puede haber dos cuestiones fundamentales que no se estarían reflejado en el precio del dólar, pero que sí están motivando el posicionamiento de los agentes foráneos.
Primero, "un atemperamiento de las expectativas para el posible mandato de José Antonio Kast. Al no haber conseguido una mayoría absoluta en ninguna de las dos cámaras, la derecha se verá forzada a negociar con el centro y será más complejo sacar adelante su agenda económica. Esto podría echar para atrás al inversor extranjero".
Y segundo, "la creencia de que la Fed podría echar el freno después de diciembre", ya que, si bien se da por descontado un recorte de tasa la próxima semana, "dado los repuntes de la inflación y la creciente disensión dentro del comité con respecto a ella, resulta muy improbable que la Fed vaya a telegrafiar más recortes más allá de la bajada de diciembre". Y con una Fed más dependiente de los datos, "al peso le costaría más cotinuar ganando terreno".