Una nueva generación de inversionistas está rompiendo los patrones tradicionales del mercado financiero. Se trata de la generación Z, que incluye a las personas de entre 13 y 27 años.
Este segmento se caracteriza por ser nativos digitales. Crecieron rodeados de Internet, entorno que los impulsó a comenzar a invertir en los mercados a temprana edad, favorecidos además, por la mayor facilidad que ofrecen las plataformas de inversiones.
Los estudios respaldan esta tendencia. De acuerdo con el “Global Retail Investor Outlook 2024 del World Economic Forum” (WEF), el 36% de la generación Z empezó a invertir antes de entrar al mercado laboral, frente al 15% de los millennials (entre 28 y 43 años), el 9% de la generación X 44 a 59 años) y el 6% de los baby boomers (60 a 78 años).
Tecnología y educación
A juicio de los analistas, uno de los puntos claves que sustentan la mayor presencia de la Gen Z en el mercado son los mayores niveles de educación y tecnología con el cual se desarrollaron, además de mayor educación financiera.
“El acceso digital es determinante. Hoy, invertir es mucho más simple y cercano gracias a Internet y las aplicaciones que permiten abrir cuentas, invertir y monitorear carteras desde el teléfono, sin fricciones ni trámites complejos”, aseguró el director comercial de Renta 4, Guillermo de la Casa.
También influye la mayor disponibilidad de canales de información. “Las nuevas generaciones pueden aprender sobre inversiones a través de redes sociales, con los denominados finfluencers, podcast o comunidades digitales”, planteó el CEO de la aplicación de inversión Zesty, David Cosoi.
Activos favoritos
El cambio no está solo en la edad, sino también en la forma y en el tipo de activos. La generación Z al guiarse mayoritariamente por redes sociales, prefieren instrumentos financieros más dinámicos.
“Observamos que los inversionistas jóvenes asumen más riesgo y se mueven con mayor dinamismo. Tienden a preferir activos con mayor potencial de rentabilidad, como acciones tecnológicas, fondos temáticos (ETF) o estrategias ligadas a la sostenibilidad”, explicó De la Casa.
También, se acentúa en este grupo etario la inversión en activos digitales, principalmente criptomonedas.