Las empresas no financieras en China afrontan vencimientos de deuda por 2,6 billones (millones de millones) de yuanes (US$ 427 mil millones) en 2014, una cifra que equivale a dos veces todo el PIB anual de una economía como Irlanda.
Pero más allá del enorme tamaño del mercado chino, los vencimientos son una señal de alerta, ya que representan un alza de 19% respecto de este año y el nivel más alto desde que China International Capital comenzó a llevar registro, en 2008.
El alto nivel de compromisos financieros que se debe renovar hace pensar a los expertos que será inevitable que la segunda economía del mundo vivirá en 2014 su primer default de bonos corporativos.
Según datos de Bloomberg, los rendimientos de los bonos de empresas chinas con calificación AAA han aumentado 89 puntos base desde el 31 de diciembre a 6,18% actualmente, tras alcanzar un máximo de 6,23% el 27 de noviembre. Eso se compara con un avance de 70 puntos base a 2,68% para otros papeles con notas comparables a nivel global.
Zhou Xiaochuan, el gobernador del Banco Popular de China (el banco central), ha dado señales de que la autoridad monetaria va a actuar para impedir que el exceso de apalancamiento, lo que ha contribuido al alza en los costos. “La probabilidad de que se produzcan defaults será mucho mayor en 2014 a medida que la maduración de la deuda alcanza niveles récord”, dijo a Bloomberg Shi Lei, jefe de research en renta fija de Ping An Securities, con base en Beijing. “La política del banco central de controlar el apalancamiento, que puede durar mucho tiempo, va a complicar a las empresas con mal perfil de deuda”.
La venta de bonos por parte de empresas chinas ha caído 23% a 1,57 billón de yuanes en los seis meses hasta hoy, comparado con el primer semestre, según datos compilados por Bloomberg.