El precio inetrnacional del crudo cerró la última jornada de esta semana al alza, apuntalado por los buenos datos sobre el desempleo en EEUU, que se situó en marzo en el nivel más bajo de los últimos dos años.
El WTI, que sirve de referencia para los precios de los combustibles que aplicará la ENAP en Chile, subió US$ 1,36 y cerró en US$ 107,70. Por su parte, el Bren europeo se incrementó en US$ 2,36 hasta los US$ 119,26.+
La primera economía del mundo añadió en marzo más empleos que lo esperado y el índice de desempleo quedó en 8,8 % de la población activa, el nivel más bajo desde 2009.
Un año y medio después que terminara la peor recesión en casi ocho décadas, la reactivación económica ha llegado al mercado laboral, ya que el mes pasado EEUU registró una ganancia neta de 216.000 empleos.
El informe entusiasmó a los mercados donde subieron los precios de las acciones, se fortaleció el dólar estadounidense y bajaron los bonos del Tesoro, en una euforia que se contagió al crudo.
La imparable apreciación del petróleo preocupa a los analistas debido al riesgo inflacionario, que despierta una vez más los fantasmas de la crisis de 2008.
Aunque los analistas saben que la situación es muy diferente a la de ese año, no descartan que el encarecimiento de los combustibles termine por dañar la coyuntura y frenar el consumo.
"Nos acercamos a la zona de peligro", estimó Ehsan Ul-Haq, analista de la asesora británica KBC Energy Economics.
"La pregunta crucial ahora es saber dónde está la frontera" en la que la demanda se resiente y los precios se desploman", añadió.
Ul-Haq considera probable que eso suceda antes de lo que ocurrió en 2008, cuando el precio del barril superó los US$ 147, pues ya se ven señales de retracción del consumo: "es visible en el Reino Unido que los automovilistas conducen más despacio, en España incluso las autoridades han limitado la velocidad", recordó.