Mercados
Mercado leyó más cerca la intervención tras minuta
El mes pasado la situación del dólar fue parte del análisis.
Por: | Publicado: Martes 4 de enero de 2011 a las 05:00 hrs.
- T+
- T-
Una sensación de que pronto habrá una pausa en el proceso de alza de tasas de interés en el país dejó ayer en el mercado financiero local el contenido de la minuta de la reunión de política monetaria del Banco Central de diciembre.
En dicha lectura, fue clave la inquietud que se percibió de parte de la autoridad monetaria por el tema del dólar, que terminó el año 2010 con un descenso cercano a los $ 40 e inició 2011 con uno de $ 2,4.
Un consejero, de hecho, afirmó que la apreciación del peso había ubicado al tipo de cambio real en el límite inferior del rango compatible con los fundamentos de largo plazo. Otro integrante de la máxima instancia del banco dijo que resultaba muy difícil argumentar a favor de una desviación significativa del tipo de cambio respecto de lo que la dinámica cambiaria en el mundo y la posición cíclica de la economía chilena sugerían. En las circunstancias actuales, la volatilidad cambiaria había aumentado, pero que el ajuste del tipo de cambio era una herramienta central para evitar una toma excesiva de riesgo cambiario por parte del sector bancario y corporativo, se leyó en la minuta sobre los argumentos del consejero, quien enfatizó que parte de la apreciación del peso y otras monedas podía estar inducida por una expectativa de excesivo optimismo sobre la capacidad de los países desarrollados de sortear la crisis y sobre la capacidad de los países en desarrollo de sostener un dinamismo importante y persistente.
En este contexto, varios consejeros expresaron que en las próximas reuniones habría que evaluar si se debían o no realizar pausas en el proceso de normalización de la tasa. Un consejero manifestó que se estaba muy cerca de ello. Otro señaló que esto dependería crucialmente de la evolución de las presiones de precios en los próximos meses.
En dicha lectura, fue clave la inquietud que se percibió de parte de la autoridad monetaria por el tema del dólar, que terminó el año 2010 con un descenso cercano a los $ 40 e inició 2011 con uno de $ 2,4.
Un consejero, de hecho, afirmó que la apreciación del peso había ubicado al tipo de cambio real en el límite inferior del rango compatible con los fundamentos de largo plazo. Otro integrante de la máxima instancia del banco dijo que resultaba muy difícil argumentar a favor de una desviación significativa del tipo de cambio respecto de lo que la dinámica cambiaria en el mundo y la posición cíclica de la economía chilena sugerían. En las circunstancias actuales, la volatilidad cambiaria había aumentado, pero que el ajuste del tipo de cambio era una herramienta central para evitar una toma excesiva de riesgo cambiario por parte del sector bancario y corporativo, se leyó en la minuta sobre los argumentos del consejero, quien enfatizó que parte de la apreciación del peso y otras monedas podía estar inducida por una expectativa de excesivo optimismo sobre la capacidad de los países desarrollados de sortear la crisis y sobre la capacidad de los países en desarrollo de sostener un dinamismo importante y persistente.
En este contexto, varios consejeros expresaron que en las próximas reuniones habría que evaluar si se debían o no realizar pausas en el proceso de normalización de la tasa. Un consejero manifestó que se estaba muy cerca de ello. Otro señaló que esto dependería crucialmente de la evolución de las presiones de precios en los próximos meses.