El Gobierno británico ha anunciado antes de la apertura de
los mercados un plan de rescate del sector bancario de Reino Unido cuyo importe
asciende a 50.000 millones de libras, más de 60.000 millones de euros (unos US$
84.000 millones)
Esta cantidad se utilizará para comprar acciones en los
principales bancos del país en una actuación sin precedentes que en la práctica
supone una nacionalización parcial del sector financiero.
Abbey, Barclays, HBOS, HSBC, Lloyds TSB, Nationwide, RBS y
Standard Chartered ya han confirmado su participación en el programa de
recapitalización, aunque el Gobierno ha asegurado que otras entidades pueden
sumarse al mismo. Estas instituciones se han comprometido a aumentar su capital
antes de fin de año en un total de 25.000 millones de libras.
Además, el Gobierno está dispuesto a facilitar un mínimo de
25.000 millones de libras adicionales a las entidades que reúnan los requisitos
necesarios para la adquisición de acciones preferentes, e incluso de títulos
ordinarios en el caso de los bancos que lo soliciten expresamente.
Estas medidas, coordinadas con el Banco de Inglaterra y el
regulador de los mercados y servicios financieros (FSA) persiguen objetivo la
estabilidad del sistema financiero.
Por su parte, el Banco de Inglaterra aportará otros 200.000
millones de libras en créditos a corto plazo para suministrar y asegurar
liquidez a las entidades.