1. Market Timing vs Asset Allocation
Las tensiones comerciales han derivado en una mayor volatilidad del S&P500 en lo que va del 2025. Así, las estrategias de “anticiparse al mercado” (Market Timing) tienen una alta dificultad de éxito. De hecho, si un inversionista vendió el S&P500 post “Día de la Liberación” y volvió a comprar ahora en junio, materializó una pérdida de 12% y compró un 5% sobre el valor inicial, versus el que permaneció invertido todo y mitigó la baja de la bolsa con una diversificación adecuada a su perfil. Así, el diseño de portafolio o Asset Allocation es crítico dado el contexto actual.
2. Deuda Privada en EEUU para mejorar el perfil de retorno en el largo plazo
El contexto de volatilidad del mercado público (tanto en acciones como en tasas de interés) nos lleva a buscar exposición a inversiones menos líquidas, pero más estables en sus métricas de retorno ajustado por riesgo. Así, la Deuda Privada en EEUU cumple un rol en este sentido, al entregar financiamiento directo a empresas a tasas atractivas para un inversionista en este entorno, manteniendo una alta diversificación entre compañías y sectores, al mismo tiempo que los créditos mantienen cierto grado de prioridad de pago y colateral.
3. “Big Beautiful Bill”… ¿Not so Beautiful?
La reforma tributaria de Donald Trump avanza en el Congreso de EEUU, la que involucra bajas de impuesto considerables, con lo que el déficit fiscal se mantendría elevado. De hecho, las estimaciones de organismos no gubernamentales apuntan a un aumento del nivel de endeudamiento hacia el 2034 de casi US$ 2,4 billones. Así, de avanzar la reforma, las tasas de interés de bonos del Tesoro de largo plazo podrían tener un impulso al alza a través de un mayor premio por plazo, por lo que mantenemos una mayor preferencia por instrumentos de renta fija de plazos medios en un portafolio diversificado.
4. Mundo vs Chile en Renta Variable
El contexto del mercado accionario se mantiene volátil y altamente sensible a los acontecimientos en materia comercial. Sin embargo, vemos espacios de mayor retorno relativo al IPSA (que ya lleva un alto retorno en lo que va del año), en la medida que las tensiones comerciales muestren una moderación mayor. En este sentido, señalamos una mayor exposición a EEUU y Asia Emergente, destacando en el primer caso una dinámica de utilidades que sigue siendo positiva, mientras que en el segundo esperamos un mejor desempeño de la región en la medida que China mantenga su velocidad de crecimiento.