El contralor general de la República, Ramiro Mendoza, reapareció en la escena pública y dijo no arrepentirse por sus polémicos dichos de fines de septiembre durante una charla en la Universidad Católica, donde criticó las reformas impulsadas por el actual gobierno de Michelle Bachelet.
"Yo no tengo por qué ofrecer disculpas. Yo creo que expliqué adecuadamente lo que pasó. Las disculpas son un correlato de arrepentimiento y yo creo que no estoy arrepentido de lo que dije por el contexto en que lo dije", afirmó en el marco del Seminario-Conversatorio "Ley del Lobby: principales desafíos en su implementación", según informa ADN Radio.
"Hay una agenda pública, pero que no significa que todas las actividades sean públicas. Pero está bien. Yo asumo los costos si hubo que tener una expresión de discusión respecto del ámbito de lo público y lo privado (...) respecto de la crítica o no crítica y del avance o no avance de las instituciones del Estado, y eso generó esta polémica. Creo que uno, al final de cuentas, y en eso asumo, uno es siempre esclavo de sus palabras y dueño de sus silencios", añadió.
El contralor reiteró que el sentido de lo que dijo se comprende bajo el contexto en el que fueron emitidas las declaraciones y que se trataba de un "análisis crítico".
"Las personas tienen la percepción de que esto no fue una especie de un kamikaze institucional, sino que efectivamente de un análisis crítico que se traduce y se expresa, además, en las preocupaciones que me han hecho presentes autoridades de este gobierno, del gobierno anterior, de que hay preocupaciones de que las instituciones funcionen adecuadamente", sostuvo.