Economía y Política
“Desaceleración no es recesión, por lo que no es bueno generar expectativas negativas”
El dirigente gremial advierte que los impuestos deben ser competitivos para que las empresas se desarrollen.
Por: Equipo DF
Publicado: Jueves 9 de mayo de 2013 a las 05:00 hrs.
Por Gonzalo Cerda Milla
A pesar de las primeras señales de desaceleración que ha evidenciado la economía nacional, que han ido acompañadas de resultados no tan favorables para la industria -ya que en marzo se mostró un retroceso de 3,4% en la producción industrial-, el presidente de Sofofa, Hermann von Mühlenbrock, se mantiene cauto y apunta a que esta situación está alineada con la capacidad de crecimiento de tendencia que tiene el país.
Esto, en el marco de las declaraciones del presidente del Banco Central, Rodrigo Vergara, que advirtieron que la desaceleración que se evidencia en la economía es más profunda que la que se previó en el último Informe de Política Monetaria.
- ¿Se han evidenciado de alguna forma en la industria estos primeros signos de desaceleración?
- Nosotros tuvimos en marzo una caída en el crecimiento de 3,4%, que evidentemente no es un buen número, pero también hay factores especiales, está el efecto de los menores días, lo que de alguna forma está alineado con el 3,1% que proyecta el INE, con eso se va crecimiento de 4,5% / 5%, con una cantidad de días similares, y esos números están en línea con el crecimiento potencial del país. Evidentemente que el efecto de la crisis de afuera, que en algún momento se pensó que no iba a durar tanto, está llegando y ahora la gente ha estado más impactada por malas noticias de afuera. Hay un poco más de cautela en las personas, y en economía pasa lo que las personas quieren que pase.
- ¿Pero ve riesgos en las perspectivas a futuro?
- Hay que tener cuidado con usar las palabras. Desaceleración no significa recesión, ni algo negativo, significa que la tasa de crecimiento es un poco más baja y no es bueno generar perspectivas tan negativas. El país tiene números macro muy sólidos, sin inflación, sí con presiones de costo y por el lado de las personas, pero en general, vemos un año llegando en torno a 5% con un país que tiene que seguir con paso seguro su camino hacia el desarrollo.
- ¿Cuánto impacta el tema energético en estas menores perspectivas de crecimiento?
- En el sector manufacturero el tema energético es fundamental y evidentemente hay costos altos. Hasta el momento no ha existido escasez, a nadie se le ha apagado la ampolleta, pero si en el tema energético las perspectivas son malas, porque hay una situación donde no se clarifica hacia donde se va a orientar tu matriz energética durante los próximos 20 años. Toda forma de generar energía ahora es mala, no se puede generar energía con agua, ni con carbón, ni con energía nuclear, ninguna califica, y desde ese punto de vista qué va a pasar, ¿la gente que es pobre, se va a quedar pobre toda la vida?, eso no tiene mucho sentido. Pero el tema energético es un problema pero creo que puntualmente no se está explicando en este bajo número de Imacec.
- ¿Cómo ve el resultado del IPC que anotó un -0,5% en abril, lejos de las proyecciones?
- Evidentemente, cuando las expectativas son distintas a la realidad la gente se pone más inquieta, pero el número si uno lo analiza con más profundidad, tiene explicaciones bastante claras. Básicamente, hay un impacto de gasolinas, transporte y energía eléctrica. Si uno saca el efecto de esos rubros estás en inflación cero, que es la misma que hubo en abril de 2012, por lo que son dos meses bastante comparables.
Los anuncios de reforma
- ¿Cuál es su opinión respecto de los anuncios de reforma tributaria que han realizado algunos candidatos?
- Como lo hemos dicho varias veces, si la pobreza se elimina subiendo el salario mínimo, y colocando impuestos, se habría eliminado en Chile hace 100 años y si eso no se hace es porque no funciona. Obviamente, hay puntos que se pueden beneficiar pero tiene costos en otros tan grandes que impiden aplicar esa medida. Hoy los impuestos deben ser competitivos para que las empresas se puedan desarrollar, porque si los impuestos ahogan ese emprendimiento, las empresas cambian su locación a otro lado. Hoy no basta ser competitivo con el precio de la energía, sino que también lo debe ser el esquema tributario que facilite el emprendimiento y el empleo. Es importante que no se esté permanentemente hablando de reforma y cambios porque uno piensa que las cosas se hacen bien pero no pasa un tiempo y se vuelve al tema tributario.