Ninguna encuesta logró anticiparlo. Franco Aldo Parisi Fernández, el economista outsider que también sorprendió en la carrera presidencial de hace cuatro años, quedó en tercer lugar en la primera vuelta de este domingo, tras obtener el 19,71% de las preferencias, es decir, más de 2,5 millones de votos.
En su tercer intento por llegar a La Moneda, el candidato del Partido de la Gente (PDG) superó a Johannes Kaiser y a Evelyn Matthei, logrando una victoria evidente en las regiones del norte: ganó en Arica y Parinacota (27,84%), Tarapacá (31,11%), Antofagasta (35%) y Atacama (32,6%); y quedó segundo en Coquimbo (26,72%), el Maule (22,15%), Ñuble (22,1%), Biobío (25,09%) y La Araucanía (20,58%).
Entre las 346 comunas de Chile, en 65 obtuvo el primer lugar.
Ante el “fenómeno Parisi” en el desierto chileno, el analista senior del Centro de Estudios Públicos (CEP), Aldo Mascareño, comenta que para el votante del norte “lo primero es el control de migración y él ha sido sistemático en eso desde la elección de 2021”.
Respecto a la adhesión que logra el líder del PDG en el mundo minero, el doctor en Sociología destaca de su programa medidas como la ampliación de la oferta formativa en minería, alianzas estratégicas en el sector, inversión en innovación en faenas y nuevos centros de excelencia con financiamiento basal.
Pero no solo eso. Operarios mineros indican que las propuestas que marcaron “un punto de inflexión” fueron: la eliminación del cobro de impuestos en los bonos mineros, el traslado del Ministerio de Minería al norte y el voto electrónico en faena.
Mineros explican su voto
Diario Financiero conversó este lunes con siete trabajadores mineros del Norte Grande, todos votantes de “Franco”, como lo llaman con cercanía, y todos nombraron las tres medidas recién expuestas como parte de sus principales motivaciones para elegirlo.
Su personalidad también es un factor: “Él no es alguien que uno tenga que mirar hacia arriba, al contrario, es como un amigo, un vecino, un familiar. Es muy cercano y sencillo, salió a las calles y conversó con mucha gente; él llega mucho a las personas, sobre todo entre los 25 y 50 años”, dice un minero de una importante faena de cobre.
Cristopher Vera, trabajador de una conocida empresa contratista, cuenta que antes de 2013, él era votante de Marco Enríquez Ominami, pero cuando el ingeniero comercial de la Universidad de Chile apareció en el radar presidencial, giró hacia el PDG. “Franco habla muy claro y explica mucho, hay otros que titubean, en cambio él se nota que es muy seguro de lo que habla, que sabe, que tiene estudios y sus ideas claras”, destaca. “Me identifico con él, porque estoy cansado de la izquierda y la derecha, y eso pasa con mis compañeros también, estamos aburridos de la política típica”.
Uno de los hitos recientes que encantó aún más al norte fue el cierre de campaña del candidato, realizado en la esquina de las calles Condell con Prat en Antofagasta. “Esa es una de las esquinas más peligrosas de la ciudad y descolocó a mucha gente -para bien-, que él eligiera ese lugar y esta región para su evento. Son cosas que marcan la diferencia para uno”, declara otro minero de la II Región.
Rosa Moya, exdirigente y primera mujer del poderoso Sindicato N°1 de Minera Escondida, recuerda haber sabido por primera vez del personaje en 2011, con el programa “Los Parisi, el poder de la gente”, transmitido por VíaX y La Red. Conocido como “el economista del pueblo”, Moya afirma que “fue mucha gente la que aprendió de sus consejos, porque te enseñaba y mostraba lo que era cada cosa sobre temas que nadie explica a la clase media”.
“Él representa el cambio que tanto queremos la gente de clase media, que ya no confiamos ni en la derecha ni en la izquierda. Necesitábamos alguien que nos escuchara, alguien menos empaquetado, común y corriente como uno, y encontramos eso en Franco”, agrega otro dirigente.
Sobre la segunda vuelta, no hay nada claro. La mitad dice no saber qué hacer, el resto se divide entre Jara y JAK. En dos cosas coinciden todos: “Quien haga suya la propuesta de eliminar los impuestos de los bonos, se gana los votos de toda la minería” y “en cuatro años más, Franco será el ganador”.