Chile sigue consolidándose como un destino relevante en la ruta de los cruceros internacionales. Así lo demuestra la proyección de recaladas para la temporada alta que se iniciará en los próximos meses, cuando se estiman más de 300 en distintos puertos de la zona norte, centro y sur de nuestro país.
Dónde más gastan los turistas de cruceros es en las recaladas en la zona central. El año pasado fue de un promedio de US$ 148 y se proyecta para este ejercicio una media de US$ 152.
Representantes del sector público y privado coinciden en que la llegada de cruceros es una actividad que constituye un importante motor para el turismo, genera empleos y potencia a múltiples servicios asociados, desde la gastronomía hasta el transporte y el comercio. Eso sí, toman nota de la baja que existirá en relación a las 402 recaladas de la temporada pasada.
La subsecretaria de Turismo, Verónica Pardo, sostiene que esta industria permite acercar a más visitantes a las distintas regiones del país y agrega que en la última temporada se recibieron más de 256 mil pasajeros en 22 destinos.
“Esto demuestra la relevancia de esta actividad no solo para ciudades tradicionales como Valparaíso o San Antonio, sino también para lugares como Punta Arenas, Puerto Williams o Castro, que se consolidan como puntos de gran atractivo”, dice la autoridad.
Pardo adelanta que para la temporada 2025-2026 se proyectan más de 300 recaladas, con la Región de Magallanes y la Antártica Chilena como protagonista, “lo que refleja el enorme potencial de este segmento para seguir aportando al desarrollo local, la creación de puestos de trabajo y el fortalecimiento de las economías regionales”.
La presidenta ejecutiva de Fedetur, Mónica Zalaquett, plantea que el potencial del turismo de cruceros en Chile es aún mayor: “Puertos como Talcahuano, Coquimbo, Iquique y Arica tienen condiciones para captar una mayor proporción de estas recaladas, diversificando la oferta turística y permitiendo que más regiones se beneficien del impacto económico y social de esta industria”.
En este escenario, enfatiza que la seguridad adquiere un rol clave. “Es fundamental garantizar que los turistas que viajan en cruceros y visitan nuestras ciudades puerto vivan una estadía tranquila y segura, que refuerce la imagen positiva de Chile como destino turístico”.
Para ello, la exministra señala se requiere un trabajo coordinado entre autoridades locales, fuerzas de seguridad, gremios y comunidades, de manera de ofrecer a los pasajeros no solo atractivos culturales y naturales de excelencia, sino también la tranquilidad de sentirse protegidos durante su visita.
El alcalde de Punta Arenas, Claudio Radonich, señala que en su ciudad van a bajar un 15% las recaladas, desde 64 en 2024 a 56 llegadas de cruceros internacionales esta temporada, a los que se deben sumar los operadores nacionales.
“Si bien somos por lejos la ciudad que más recibe cruceros, esta baja es una luz de alerta, porque esta es una ciudad que vive del turismo, es una industria muy dinámica, donde siempre hay competencia de otras ciudades como Ushuaia. Por lo tanto, aquí lo que vemos con preocupación son las demoras en la inversión portuaria que permita tener la infraestructura adecuada a precios competitivos que incentiven la llegada de más cruceros hasta nuestra ciudad”, advierte.
Preferencias y lo que gastan
Según cifras de la industria, el perfil del visitante que llega a Chile en cruceros gastó en promedio US$ 68 por visita en puerto en la temporada 2017-2018; la temporada pasada fue de US$ 96 y se calcula que en la que está por comenzar gastará US$ 98. En comparación, el gasto promedio de un tripulante de estas embarcaciones fue de US$ 37 en la temporada 2017-2018; US$ 52 el año pasado y se proyecta US$ 54 en la próxima temporada.
Donde más gastan los turistas de cruceros es en las recaladas en la zona central. El año pasado promedió US$ 148 y se proyecta para el siguiente ejercicio US$ 152; mientras que en la zona norte es donde menos gastan en promedio: el año pasado fue US$ 49 y para este año se estima en US$ 50.
Respecto al perfil de los turistas de este rubro, la edad promedio es de 59 años; las principales nacionalidades de los visitantes son Estados Unidos con 37,7%, Canadá con 19% y Reino Unido con 11,7%.
Su motivación principal es conocer destinos de Chile (80%) y su naturaleza (55%). Señalan que sus motivaciones para viajar en cruceros es combinar aventura, exploración y relajación.
En cuanto a los gastos en tierra, un 48,5% lo destina a alimentación y bebidas; un 43,5% en recuerdos y regalos; un 39,9% en tours y excursiones; y 28,7% en transporte local.