Los consumidores pueden pagar hasta el dobre por un avance en efectivo, con las condiciones menos convenientes según un sonde realizado por el servicio nacional del Consumidor (Sernac).
Por un avance de $ 100.000 a 12 meses, se puede pagar desde $ 103.880 (Coopeuch) hasta $ 243.354 (Banco Santander) lo que representa una diferencia de $139.474 ó 134% de aumento, según el sondeo realizado entre el 19 y el 25 de enero, que incluyó 13 bancos, una cooperativa, 14 empresas del retail (supermercados y multitiendas) y cinco cajas de compensación (créditos simples).
Asimismo, la entidad subrayó que el costo final del beneficio también dependerá del "tipo de cliente" que se sea.
Por ejemplo, precisa el Sernac, en Banco Santander dos consumidores que pidan el mismo monto y plazos, pueden pagar hasta $ 124.755 o un 105% de diferencia, con un mínimo de $118.599 y un máximo de $243.354, "dependiendo del tipo de cliente que sea para la empresa, esto es, de acuerdo a la evaluación económica que haga la institución del cliente, los productos asociados que tenga, el riesgo que represente, las condiciones de la operación (si considera costos fijos) etc.".
¿Qué es lo más barato?
Según los resultados del estudio, las cajas de compensación tienen el menor costo promedio de $108.344 (y costo único) por un crédito simple de $ 100.000 en 12 cuotas.
Le siguen (considerando los mínimos) los avances con tarjetas de crédito bancarias con un mínimo promedio de $ 113.243 y un máximo de $ 175.154 y los avances con tarjetas de crédito del retail con un promedio mínimo de $127.228 y un máximo de $155.816.
El Sernac señaló que, en general, un avance en efectivo puede resultar más caro que usar la tarjeta, y lamó a los consumidores a "fijarse no sólo en los intereses, pues el costo final está formado también por las comisiones".