En menos de un año, SoftBank Group ha rotado su portafolio con la precisión de un fondo de cobertura. Bajo el mando de Masayoshi Son, el conglomerado japonés vendió participaciones de Nvidia y Ola Electric, al tiempo que reforzó su exposición a la inteligencia artificial y la infraestructura que la sustenta.
Solo este martes alcanzó su punto de inflexión, al enajenar más de 32 millones de acciones del fabricante estadounidense de chips, operación con la que recaudó cerca de US$ 5.800 millones. Poco antes, el grupo había reportado un beneficio neto de 2,5 billones de yenes (US$ 16.600 millones) en el último trimestre fiscal, más del doble que el año anterior y muy por encima de las previsiones del mercado, impulsado por la valorización de su participación en OpenAI.
Según el CFO, Yoshimitsu Goto, la decisión respondió a la necesidad de “desinvertir carteras existentes” para financiar una nueva ola de apuestas tecnológicas.
La firma aceleró ha estado acelerando su estrategia: en marzo, adquirió la estadounidense Ampere Computing, fabricante de CPUs para centros de datos basadas en la arquitectura de Arm Holdings, en una operación de US$ 5.000 millones. En agosto, invirtió US$ 2 mil millones en Intel Corporation, en paralelo al plan del Gobierno estadounidense de fortalecer la manufactura local de chips. Y en octubre, cerró la compra de la división de robótica de ABB por US$ 5.400 millones, reforzando su apuesta por la “IA física”, que combina algoritmos con automatización industrial.
También ha habido ajustes menores: en septiembre redujo su participación en la india Ola Electric y, tras la reestructuración de OpenAI, consolidó cerca de 11% de matriz de ChatGPT, segundo solo tras Microsoft.
Las acciones de SoftBank se han más que duplicado en 2025, superando los 21 mil yenes por papel, frente a un avance cercano al 25% del Nikkei 225, según datos de Bloomberg.
Según analistas de CLSA citados por Financial Times, SoftBank dejó atrás su imagen de fondo disperso y se consolida como el principal intermediario de capital tecnológico en Japón.
SoftBank extiende su red
Más allá de los grandes acuerdos en el terreno de la IA, SoftBank tiene activa su red global de inversiones a través de operaciones de menor escala, orientadas a reforzar su presencia en mercados emergentes.
En junio, el conglomerado japonés inyectó US$ 40 millones en la fintech irlandesa NomuPay, con el objetivo de expandir su plataforma de pagos internacionales en Europa, Oriente Medio y Asia.
A fines de 2024 y comienzos de 2025, SoftBank Vision Fund 2 participó en una ronda cercana a US$ 20 millones en OpusClip, una startup de inteligencia artificial generativa enfocada en la edición automatizada de video para redes sociales, de acuerdo con Business Insider. Con esta inversión, el grupo buscó ampliar su exposición a aplicaciones creativas de IA, más allá del hardware y la infraestructura.
En América Latina, SoftBank también ha estado activo. Por ejemplo, Kavak, la plataforma mexicana de autos usados valorada en US$ 2.200 millones en 2025, cuenta entre sus inversionistas a SoftBank. Y en el mercado mexicano de pagos, Clip alcanzó una valoración cercana a los US$ 2 mil millones en 2024 con participación del grupo japonés.
No todo, sin embargo, ha sido positivo. Vision Fund 2 registró una pérdida del orden de US$ 700 millones en uno de los últimos trimestres reportados, afectado por la caída en la valuación de varias startups, entre ellas la india Ola Electric y la plataforma de delivery Swiggy, de acuerdo con The Economic Times.