Hace poco más de una década, Ricardo Sylvester y Yuri Andrade -el primero es tío del segundo y ambos son ingenieros- vieron una oportunidad en la generación de energía renovable en Chile y crearon oEnergy. Partieron haciendo pequeñas centrales de generación distribuida (PMGD), pero a poco andar se expandieron desde la construcción de proyectos a la operación de estas unidades.
“Hemos construido unos 52 proyectos, equivalentes a 296 megawatts (MW), pero hoy operamos unos 100, de otros actores del sector”, resume Yuri Andrade desde Estados Unidos, donde reside.
“oEnergy nace con el propósito de descubrir el potencial de las energías renovables en Chile y aprovechar las oportunidades que brinda un sistema eléctrico que se ha ido complejizando, para que éste sea resiliente, eficiente y seguro”, expone.
Este ingeniero en ciencias de materiales de la Universidad de Cornell, que ha trabajado como tal en Intel y Carl Zeiss, cuenta que desde hace algunos años partieron lo que definen como “la segunda fase de oEnergy”, centrada en el desarrollo de soluciones de almacenamiento. Esto de cara a una de las necesidades más urgentes del sistema, que es disminuir o terminar con el llamado vertimiento, que es aquella energía renovable que se desperdicia porque no se distribuyó a tiempo.

Yuri Andrade Sylvester, director y gerente de nuevos negocios de Oenergy
Y en esta etapa ingresó, en abril de 2025, el Grupo Borda -ligado al empresario salmonero y minero Martín Borda- mediante un aumento de capital, quedando con el 40% de oEnergy por un monto no divulgado. Tío y sobrino poseen la porción mayoritaria de la compañía.
Inversiones
Andrade detalla que a partir de esta segunda fase la firma ha acumulado una cartera total de 54 proyectos, de los cuales 30 corresponden a iniciativas de almacenamiento stand-alone BESS (Battery Energy Storage System) y otros 24 corresponden a proyectos de generación solar más almacenamiento BESS.
Todos estos desarrollos requieren unos US$ 2.500 millones de inversión, que no provienen de la empresa misma.
El modelo de negocios de oEnergy es desarrollar los proyectos, con toda la ingeniería y el “músculo” para pedir permisos y vincularse con la comunidad, y obtener las resoluciones de calificación ambiental (RCA) respectivas.
Andrade explica que “oEnergy ha invertido y continuará invirtiendo su capital propio de riesgo en la fase de desarrollo de los proyectos y la estructuración del financiamiento (Capex), donde la empresa promueve modelos asociativos flexibles con generadoras, compañías mineras, fondos de inversión en infraestructura o socios estratégicos, con el objetivo de codesplegar el Capex requerido para la construcción y operación de los proyectos”.
El ingeniero, que es el gerente de Nuevos Negocios de oEnergy, detalla que “dentro de esta estrategia se contempla la rotación parcial o total de activos (asset rotation), mecanismo habitual de retorno de capital y reciclaje de inversión”.
En esta línea, de la cartera en curso -de los proyectos stand alone BESS-, tienen ya 13 RCA aprobadas y seis proyectos cuentan con resolución de pertinencia ambiental favorable. La expectativa es obtener las RCA de los 11 proyectos restantes durante el primer semestre de 2026, indican en la empresa.
En las 25 iniciativas hídridas (de energía solar con BESS), hay 11 proyectos con RCA favorable, dos con resolución de pertinencia ambiental positiva y siete proyectos en evaluación ambiental cuya resolución se espera para el primer trimestre de 2026. Además, se proyecta presentar una declaración de impacto en otros siete proyectos antes de marzo del próximo año.