Coca-Cola entregó este martes su balance correspondiente al tercer trimestre del año, periodo en el que sus ganancias se matuvieron estables, ubicándose en US$ 1.900 millones, o US$ 0,81 dólar
por título, desde los US$ 1.890 millones, o US$ 0,81 por acción, del mismo
periodo del año anterior.
Las ventas entre julio y septiembre, por su parte, fueron inferiores a las previsiones. Bajaron un 4% en los tres meses y llegaron a US$ 8.040
millones, mientras que las proyecciones del mercado hablaban de US$ 8.110 millones.
En tanto, los volúmenes crecieron un 2%, luego
de escalar un 4% en el segundo trimestre y un 2% en el
primer trimestre.
La amplia base geográfica de Coca-Cola, especialmente en
mercados en desarrollo como India y China, le ayudó a contrarrestar una
desaceleración en Estados Unidos, señaló la principal empresa de refrescos del mundo.
Los volúmenes trimestrales aumentaron un 7% en
América Latina, un 6% en la región Pacífico y un 2% en el
segmento Eurasia y Africa.