La irrupción de capitales estatales árabes en Chile no se detiene. Si en 2024 se concretó, por un lado, la entrada de la gigante petrolera saudí Aramco y, por otro, la del grupo emiratí de Abu Dhabi a través de Unifrutti al mercado local, hoy un nuevo actor del Golfo Pérsico posa sus ojos en el país.
Se trata de dnata, proveedor global de servicios de aviación y viajes y parte de Emirates Group, que avanza en negociaciones para ingresar a Chile mediante la compra de la firma local CargoMobility, especializada en servicios logísticos aeroportuarios.
Según pudo constatar DF con tres fuentes conocedoras, las conversaciones entre ambas partes se vienen desarrollando desde hace un par de meses y hoy avanzan a paso firme, en un proceso que se negocia en privado y que está siendo asesorado por el banco de inversión Altis, junto al estudio jurídico Cariola Díez Pérez-Cotapos.
El precio de la potencial compra, por ahora, se mantiene bajo reserva.
35 países en los que tiene presencia dnata. US$ 430 millones en utilidades registró la Emiratí en 2024.
dnata
Dubai National Air Travel Agency (dnata) es una empresa estatal de Emiratos Árabes Unidos (EUA) que forma parte de Emirates Group, conglomerado propiedad del Gobierno de Dubái a través de su fondo soberano “Investment Corporation of Dubai” (ICD). El holding también es controlador de Emirates Airlines, una de las aerolíneas más grandes del mundo.
La firma actúa como proveedor global de servicios aeroportuarios y de viajes, con operaciones que abarcan asistencia en tierra y en el aire. Entre ellas, manejo de carga -su negocio más rentable- servicios de catering, venta minorista y gestión de viajes.
A la fecha, se encuentra presente en 35 países y tiene operaciones en más de 174 aeropuertos, colaborando de esta forma con 347 aerolíneas a nivel mundial.
De acuerdo con la memoria anual de Emirates Group, dnata maneja más de 3,1 millones de toneladas de carga al año, lo que la posiciona entre los operadores de carga aérea más relevantes a nivel global.
Con ello, “continúa desempeñando un rol crítico en la diversificación de la base de ingresos del grupo, a través de su portafolio global de servicios de aviación y viajes”, según señala el documento.
En el ejercicio 2024, la compañía registró utilidades por US$ 430 millones e ingresos por US$ 5.800 millones. En paralelo, su matriz, Emirates Group, alcanzó utilidades por US$ 5.800 millones e ingresos por US$ 39.600 millones, cifra que supera en un 41% los de Empresas Copec, el holding chileno con más ingresos en dicho periodo.
Las tratativas de dnata en Chile se suman a una estrategia de expansión regional que la firma viene desplegando desde hace años.
En 2015, la firma adquirió la brasileña RM Ground Services, especializada en servicios aeroportuarios en tierra, rampa, carga y pasajeros, con la cual marcó su primera incursión en Sudamérica. Esa operación le permitió incorporar más de 2.100 empleados y presencia en 24 aeropuertos brasileños.
La chilena
CargoMobility, en tanto, es una empresa chilena de servicios logísticos aeroportuarios constituida en abril de 2014 por sus socios fundadores Felipe Elgueta y Juan Pablo Galán.
La firma cuenta con más de 19 años de experiencia y tiene más de 800 trabajadores. Además de operar en el Aeropuerto Arturo Merino Benítez de Santiago, mantiene presencia en Brasil, específicamente en el aeropuerto de Sao Paulo.
Su foco está en la prestación de servicios aeroportuarios y logísticos, con énfasis en el handling de carga, transporte interno, operación en rampa y mantención de equipos de apoyo en tierra, trabajando tanto con operadores aeroportuarios como con aerolíneas.
Recientemente, CargoMobility volvió a estar en el radar del sector tras adjudicarse, mediante una licitación pública, el contrato para operar el servicio de asistencia de movilidad en el Aeropuerto de Santiago, a partir de diciembre de este año. El servicio -que hasta ahora estaba en manos del propio aeropuerto o a través de su concesionaria- fue adjudicado a la firma chilena por sobre competidores como Deltamed y Swissport.
Arremetida árabe
La operación en curso se inscribe en un patrón más amplio de inversión proveniente de capitales árabes, que en los últimos años ha comenzado a materializarse en adquisiciones concretas en sectores estratégicos de la economía chilena.
También desde Emiratos Árabes, el caso más emblemático es el de Unifrutti, que fue adquirida en 2022 por el fondo soberano de Abu Dhabi ADQ, por un monto que no se ha desclasificado.
Esa adquisición era solo el comienzo. En enero de 2024, Unifrutti cerró la compra de Verfrut -hasta entonces del empresario Romano Vercellino- por US$ 680 millones, convirtiendo al grupo árabe en líder de la exportación de fruta fresca desde el país. A inicios de diciembre, la firma volvió a salir de compras, pagando US$ 150 millones por Global Agro Perú y Sago Perú, firma que produce uva de mesa en ese país, pero cuyos capitales eran chilenos, ligados a la familia Barros y otros socios minoritarios.
Y no es el único país de esas latitudes que está abriéndose espacio en Chile. El caso más emblemático es el de Aramco, la petrolera estatal de Arabia Saudita que adquirió Esmax, la sociedad que operaba Petrobras en Chile. Desde ese paraguas, han estado reconvirtiendo todas las bencineras a la marca Aramco, con un agresivo plan de expansión en el país.