La italiana Ferrero Hazelnut Company es la responsable de que los avellanos sean uno de los frutales más plantados en Chile. La compañía, que opera en el país a través de su filial AgriChile, procesa estas avellanas para la producción internacional de marcas como Nutella, Kinder y los bombones Rocher.
Ahora, la firma anunció una nueva ronda de inversiones en el país, "orientada a ampliar su capacidad de procesamiento, limpieza y secado de avellanas, con el objetivo de acompañar el crecimiento sostenido del sector y reforzar el rol estratégico del país dentro de su red global de abastecimiento".
El plan contempla la construcción de una tercera planta en Chile, que se ubicará en La Araucanía y estará especializada en el descascarado del fruto.
Asimismo, también renovarán la planta de Alto Camarico (Región del Maule), la primera de Ferrero en Chile, que se inauguró en 2015; y la ampliación de la capacidad de procesamiento de la planta de San Gregorio (Región de Ñuble), operativa desde 2024. "Se completarán antes de la próxima temporada", dijo Ferrero.
Las obras del nuevo complejo en La Araucanía están proyectadas para comenzar el próximo año e irán acompañadas de una ampliación en la capacidad de limpieza y secado en la misma región.
Ferrero explicó que estas inversiones se enmarcan como parte de su estrategia multipolar de abastecimiento global, que integra distintas regiones productoras (Chile, EEUU, Italia y Turquía), para asegurar un suministro estable y sostenible para los mercados internacionales.
“Estas inversiones no solo fortalecerán la capacidad de procesamiento local, sino que también contribuirán a acortar los tiempos logísticos, aumentar la red logística, la eficiencia operativa y respaldar la expansión del cultivo del avellano europeo en el país, consolidando a Chile como el segundo productor mundial y un socio estratégico en la red global de abastecimiento de Ferrero”, dijo el CEO de Ferrero Hazelnut Company, Marco Botta.