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Genética y repoblamiento destacan en la agenda de trabajo del rubro ovino

Por: | Publicado: Lunes 31 de enero de 2011 a las 05:00 hrs.
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Muchos de los avances logrados en materia ovina se deben a los estudios e investigaciones desarrollados por el Consorcio Ovino, constituido en 2008 por el INIA y cinco empresas que representan casi el 70% de este negocio en el país: Carnes Ñuble, Agro Ñuble, Mafrisur, Tattersal, Frima y Agromarín.

Entre 2009 y 2010, esta entidad público-privada logró desarrollar quince proyectos, de los cuales se desprenden dos líneas generales que pretenden mantener: la de mejoramiento genético y la de capacitaciones.

Tras trabajar dos años en la estandarización de los sistemas, hoy contamos con una base de datos de ovinos de aproximadamente once razas, con veinte mil datos y aproximadamente doce mil animales con valores genéticos aditivos ya constituidos a través de nuestro programa genético, destacan.

Para este año, definido como una segunda etapa del Consorcio, la entidad agregó cuatro proyectos. Dos se relacionan con nuevos estudios para mejorar la cadena de exportación de los productos ovinos, y el otro par se vincula a la generación de unidades de negocio en la zona centro y sur de Chile enfocadas en el repoblamiento ovino a través del abastecimiento de distintas categorías animales para distintos modelos de negocios (engorda de corderos, venta de vientres preñados, entre otros).

Durante 2011 esperamos establecer con algunos socios e instituciones claves las primeras unidades bajo contrato de producción con el Consorcio. Así se compartirá el riesgo y los costos, se tendrá un protocolo de trabajo y se comercializará a través de nosotros, para luego repartirse las utilidades entre los socios, explican.



Poca relación con universidades

El trabajo con establecimientos de educación superior ha sido escasa. En parte, dicen en el Consorcio, porque el sector ovino tiene un claro abandono por parte de los especialistas. En Chile no existen más de treinta personas con algún grado de especialización en esta producción y de ellas, más del 60% está en el INIA.

Es por ello que para este año uno de los objetivos es generar más nexos con estas instituciones, potenciando los proyectos programados con la Universidad Austral (Departamento de Ingeniería), y en fase de diseño con la Universidad de Chile (Escuela de Agronomía), entre otros.

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