El mercado del litio, que entró en un oscuro túnel de precios desde finales de 2022, anotando una caída del 90% en sus valores a la fecha, habría ya iniciado el tránsito hacia la luz del reequilibrio.
20% subió la cotización del mineral tras el cierre de la mina Jianxiawo de Catl.
Según un informe de Bank of America (BofA) al que tuvo acceso DF, la disciplina en la producción y las recientes medidas regulatorias en China “están devolviendo cierta normalidad al mercado”, lo que impulsaría los precios un 54% en los próximos meses.
“Después de cerrar temporalmente la mina de lepidolita de CATL en Jianxiawo, el litio se revalorizó un 20%”, destacó el banco, subrayando que la intervención china redujo el exceso de oferta de la industria, aunque aún no se puede hablar de déficit.
US$ 14.000 por tonelada debería ser el precio del litio en los próximos meses.
Considerando que el gigante asiático investiga la paralización de al menos otras 100.000 toneladas de capacidad, BofA proyectó el impacto con el siguiente ejercicio: “Si todas esas instalaciones permanecieran cerradas durante el resto de 2025, las relaciones históricas justificarían un precio promedio del litio de US$ 20.000 por tonelada este año. Ahora, ese objetivo parece difícil de alcanzar con un precio promedio de US$ 9.100 en lo que va del año”.
“Aún así”, agregó la entidad estadounidense, “pone de relieve lo disruptivo que podría ser la campaña de China; los precios podrían seguir subiendo hasta alcanzar los US$ 14.000 por tonelada en los próximos meses”, lo que corresponde a un alza de más del 50% versus los valores actuales.
El mayor dinamismo de los precios en las últimas semanas también fue relevado por la chilena SQM en sus resultados del segundo trimestre, donde anticipó un mejor escenario para los valores en el tercer cuarto del año. Lo anterior, luego de reportar una caída en sus utilidades del 59% entre abril y junio, justamente por el impacto del deprimido valor del mineral blanco.
La nueva ley china
A inicios de julio, Beijing revisó su Ley de Recursos Minerales para que el registro y la aprobación de las minas pasaran a ser responsabilidad del Ministerio de Recursos Naturales. Esto significa que los gobiernos locales ya no pueden conceder licencias de explotación sin la autorización de dicha cartera, motivo por el cual las operaciones están siendo investigadas.
De acuerdo con BofA, en la actualidad solo una mina en Jiangxi cuenta con la aprobación nacional para extraer litio, pero está inactiva; la mina Qarthan de Zangge tuvo que detener su actividad porque tenía licencia solo para potasa, pero el litio representa un tercio de sus ingresos; otras ocho explotaciones en Yichun están siendo revisadas.
¿Cuál es el objetivo de China? Para el banco, las autoridades asiáticas están impulsando una combinación de recortes de producción; un cumplimiento más estricto para las minas en funcionamiento; un proceso de verificación de recursos más riguroso; y un enfoque coordinado para la aprobación de nuevos proyectos. “Con tres operaciones cerradas, al menos temporalmente, esto puede significar que el crecimiento ilimitado de la producción está llegando a su fin”, indicó BofA.
Las empresas con minas de lepidolita tienen hasta el 30 de septiembre de este año para aclarar su producción y presentar evaluaciones de reservas y leyes del mineral a las autoridades.
Almacenamiento: demanda subestimada
Otro de los puntos clave del análisis y las proyecciones del precio tiene que ver con la demanda. El informe marca que el requerimiento de litio para los vehículos eléctricos es bueno y está aumentando, “aunque a un ritmo más lento de lo que habíamos previsto anteriormente”.
Sin embargo, un actor del mercado que había sido secundario hasta el momento, cobra cada vez más protagonismo e incluso estaría “subestimado”: el del almacenamiento de energía en baterías.
Sobre este segmento, que ha ayudado a reducir los excedentes, BofA dice estar de acuerdo con los comentarios de Tony Ottaviano, CEO y managing director de Liontown Resources, quien afirmó que “el mercado sigue subestimando la demanda procedente de este sector”.
También comparte lo dicho por Ken Brinsden, presidente y CEO de la empresa canadiense de desarrollo de litio Patriot Battery Metals, quien dijo que “hay una posibilidad razonable de que, en el almacenamiento de energía estacionaria, sigamos acelerando”. No solo eso, el ejecutivo vaticinó también: “Este mercado va a ser mucho mayor que el mercado de los vehículos eléctricos, porque las redes energéticas mundiales necesitan estabilizarse”.
Para aterrizar la “subestimación”, el banco expuso que los observadores del sector esperan instalaciones de alrededor de 250 GWh este año. Sin embargo, solo los fabricantes de baterías de China han producido 440 GWh de celdas de almacenamiento de energía en lo que va del 2025.
“Si bien entendemos que los proyectos de almacenamiento de energía tienen plazos de entrega largos, esa discrepancia tiene enormes implicaciones para la demanda de litio”, comentó la entidad.
Actualmente, una de cada tres baterías que se producen se destina a almacenamiento.