Schmidt y el balance de su gestión a una semana de abandonar la SNA

Menos de una semana le resta a Luis Schmidt en la presidencia de la Sociedad Nacional de la Agricultura (SNA), ya que el próximo lunes el nuevo directorio de la entidad gremial definirá el nombre de su sucesor, el que de acuerdo a los resultados de las votaciones indirectas que se han realizado en regiones dan como ganador a Luis Mayol.

De esta forma, Schmidt –quien esta mañana participará en su último comité ejecutivo de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), al que asistirá el presidente del Senado, Jovino Novoa- culminará cuatro años como timonel de los empresarios del sector agrícola y nueve en Fedefruta, por lo que el dirigente no duda en señalar: “He estado toda una vida ligado el mundo gremial, por ende, éste es un capítulo cerrado”.

De hecho, Schmidt comenta que en el corto y mediano plazo sus prioridades son sólo dos: abocarse a sus negocios y dedicarle más tiempo a su familia.

- ¿Cuál será su legado en la SNA, luego de cuatro años?

- No soy tanto de legados, ya que uno trabaja con un directorio, pero la verdad es que cuando asumí la presidencia de este gremio había muchas dificultades económicas y hoy tenemos todos los números saneados. Además, existían una serie de rencillas, pero logramos tener una institución reconciliada, los resquemores se perdieron y hemos incorporado a una serie de gremios, a gente joven, a mujeres, por ende, podemos mirar el futuro de la SNA con mucha tranquilidad. Ahora bien, ése no es mi mérito, sino que de todo un equipo.

- ¿Cuál es su balance de su relación con el gobierno y con las otras ramas de la CPC?

- Con todos los gobiernos que he tenido que trabajar fuimos construyendo confianzas, siempre fuimos escuchados y muchas cosas las hicimos en conjunto, sobre todo, en materia de apertura comercial. Es verdad que con la Presidenta de la República, Michelle Bachelet, tuvimos algunas discrepancias, pero ella es una persona que escucha y supimos entendernos. Respecto de los otros gremios, la verdad es que siempre han existido diferencias.

- ¿En qué sentido?

- Es que yo privilegio un estilo más directo y crítico, pues considero que la forma de avanzar es ésa. Sin embargo eso me trajo más de una diferencia con Bruno Philippi ¡El punto es que uno tiene que ser claro en sus planteamientos! De hecho, yo recibí más de una vez las andanadas del ex ministro del Trabajo (Osvaldo Andrade) y esos momentos son poco gratos, pero uno tiene que hablar. Claro que hay gremios más poderosos que prefieren no hablar, pero en la agricultura, esta actividad no se hace en la Plaza de Armas, se hace en regiones y, por lo tanto, mis agricultores quieren saber qué está haciendo este señor que está instalado lejísimos de ellos, si habla con el gobierno de las situaciones que se están dando, y de sus problemas.

- Entonces, su estilo le trajo más de un problema...

- ¡Por supuesto! y pido disculpas si pasé a llevar a alguno que tiene otra forma de enfocar las cosas, pero yo soy un tipo extremadamente directo, las cosas buenas las voy a reconocer siempre, sin embargo, las cosas malas las diré con la misma claridad y no tengo problemas en eso.



La evaluación

- ¿Está conforme con su gestión en la SNA?

- Tremendamente. Estoy consciente de que en algunos momentos saqué ronchas, pero mi evaluación es más que positiva y estoy muy agradecido también.

- ¿Cuáles fueron sus momentos más complejos a la cabeza de la SNA?

-El año pasado cuando el tipo de cambio empezó a caer. Ahí se produjeron algunos enfrentamientos, ya que el problema era mayúsculo e incluso tuvimos problemas con el Ministerio de Hacienda, por lo que ese momento fue duro. Respecto de este año, hemos tenido algunas complicaciones, pero no ha sido un año caótico.

- ¿Ha echado de menos medidas concretas para el agro para mitigar el impacto de la crisis económica?

- De todas maneras, y eso lo he conversado en las últimas giras con la Presidenta Bachelet, ya que si bien la agricultura crecerá este año, la crisis financiera ha afectado fuertemente la capacidad crediticia del sector. Hace diez años, del total de colocaciones de la banca casi el 11% era hacia la agricultura, hoy día es de 3,6%.  Entonces, el gobierno ha anunciado medidas, pero los agricultores están endeudados con los proveedores de insumos, con la industria, con los importadores y ahí hay que tomar cartas en el asunto.



El sucesor y sus planes

- ¿Cómo ve la opción de Luis Mayol para encabezar la SNA?

- El es una excelente candidato y una persona joven, que me acompañó durante todo mi mandato y me ayudó en la modificación estatutaria, por ende,  diría que aportará mucho en el tema de unidad gremial y de participación de las instituciones gremiales.

- ¿Seguirá participando en la SNA como ex presidente?

- En este gremio los ex presidentes no cumplen un labor puntual como en otras instituciones, pero evidentemente si me piden ayuda ahí estaré.

- ¿Su carrera gremial usted la concibe como un capítulo cerrado?

- Totalmente, ya que llegué a los puestos más altos en el sector agrícola y tuve al agrado de trabajar con tres presidentes distintos en la Confederación de la Producción y del Comercio.

- ¿Cómo ha visto la gestión de Rafael Guilisasti a la cabeza de la CPC?

- Súper buena. El es un dirigente empresarial súper inteligente y un amigo, por ende, en él yo vi un aliado y un gran apoyo.