Texas Instruments ganó US$ 538 millones en el tercer trimestre, lo que supone un descenso del 4,4%
respecto al mismo periodo de 2008, pero supera las previsiones,
duplica lo ganado en los tres meses previos y refleja un aumento en
la demanda de sus chips y semiconductores.
El fabricante de componentes electrónicos con sede en Dallas
(Texas) informó hoy que su beneficio por acción quedó en 42 centavos
de dólar, frente a los 43 de hace un año y a los 20 del periodo
abril-junio de 2009, lo que batió las expectativas de los analistas
y superó las previsiones de la propia compañía.
El presidente de Texas Instruments, Rich Templeton, destacó el
"progresivo y fuerte incremento" de la demanda de sus productos en
los dos últimos trimestres, "a medida que nuestros clientes suavizan
las correcciones acometidas en sus almacenes y comienzan a aumentar
los niveles de producción de sus fábricas".
Los ingresos de la firma, que en el tercer trimestre alcanzaron
los US$ 2.880 millones, también fueron inferiores a los de un
año antes, en este caso un 15%, pero reflejaron un incremento del
14% respecto a los tres meses inmediatamente anteriores.
Texas Instruments también adelantó hoy que su beneficio del
cuarto trimestre del año oscilará entre los 42 y los 50 centavos de
dólar por acción y las ventas entre los US$ 2.780 y los US$ 3.020 millones.
Esta previsión confirma la creencia de Texas Instruments -similar
a la ya expresada por otros fabricantes de semiconductores- de que
la demanda de estos productos empieza a recuperarse después de más
de un año de recesión económica.