El mandatario brasileño Michel Temer fue hoy uno de los primeros líderes en intervenir con un discurso en el Foro Económico Mundial de Davos. La autoridad aseguró que luchará "día y noche" para que se apruebe en su país la reforma de pensiones, crucial para combatir el creciente déficit fiscal de la principal economía latinoamericana.
Nombrando las reformas que ha hecho su gobierno y que han permitido "mejorar la competitividad de la economía y del producto brasileño", el mandatario aseguró "sin vueltas y con convicción" que "completaremos nuestra agenda. Brasil que va a las urnas en octubre sabe que la responsabilidad da resultados. Tras el equilibrio de las cuentas, viene el crecimiento y el empleo. Aquello permite políticas sociales".
También afirmó que "hoy, los principales actores de Brasil, políticos y económicos, están de acuerdo en que no hay alternativa a la agenda de reformas que estamos promoviendo", agregando que el "espacio para dar una vuelta hacia atrás prácticamente no existe".
"Cada vez más, la población brasileña percibe que el sistema actual es injusto e insostenible. Vamos a luchar, día y noche, voto por voto, para aprobar la propuesta que está en el Congreso", aseveró, refiriéndose al proyecto de pensiones. También adelantó que "nuestra agenda no se agota con las pensiones. Antes del fin del año, queremos promover la simplificación de nuestro sistema tributario".
Corrupción en la mira
Preguntado por el tema de corrupción, en que él mismo ha sido vinculado, Temer aseguró que "habrá un combate arduo contra ella". "Tuvimos la revelación de que las instituciones están funcionando, tenemos separación absoluta de poderes y cada uno ejerce libremente sus actividades", prosiguió. "Prevalece el criterio de transparencia absoluta en los actos de la política federal" y, "cuando hay penas, ellas son aplicadas por el poder judicial".
Por lo mismo, aseguró que hay una "seguridad contractual" para las empresas. "Nadie quiere firmar un contrato sin saber lo que sucederá adelante", dijo. "Invierten en Brasil, no se arrepentirán", terminó su discurso.