El gobierno argentino dijo hoy que espera
ingresar fondos por US$ 1.000 millones mediante la reapertura
del canje de deuda en mora para los acreedores que no adhirieron a
la reestructuración de 2005.
"Esperamos que a Argentina le ingresen US$ 1.000 millones adicionales frescos por esta operación", dijo hoy el ministro de
Economía argentino, Amado Boudou.
Las autoridades anunciaron ayer que presentarán una oferta de canje
para aquellos acreedores con bonos en mora por US$ 20.000 millones que no se adhirieron a la reestructuración del 2005, en un
paso previo al regreso del país a los mercados internacionales tras
el cese de pagos de 2001.
Las autoridades argentinas iniciarán hoy los trámites para
presentar una nueva oferta de refinanciación ante las comisiones de
valores de Estados Unidos, Alemania e Italia, países donde se
encuentran la mayor parte de los tenedores de bonos que no se
adhirieron al canje de 2005.
La oferta de reapertura será delineada en base a una propuesta
que acercó a Argentina un grupo de bancos integrado por Citibank,
Barclays y Deutsche Bank, y que representa a acreedores con bonos
por US$ 10.000 millones.
Boudou confió en que la oferta, que permitirá "terminar con este
tema no resuelto de Argentina", "tendrá mucha aceptación".