La agencia de calificación de riesgo Standard & Poor’s (S&P) puso en revisión negativa a las más importantes entidades financieras españolas. El periódico Expansión señala que se trata de los bancos Santander -y sus principales subsidiarias, Banesto y Santander UK, así como a sus filiales “altamente estratégicas” Santander Consumer Finance, Santander Holdings U.S.A y Sovereign Bank-, BBVA (y su filial BBVA USA Bancshares), Caixabank, Sabadell, Ibercaja, Bankinter, Bankia, Banco Popular, Kutxa, BBK, la Confederación Española de Cajas de Ahorro, y el Banco Financiero y de Ahorros.
S&P explicó que esto responde al “impacto” que pueda tener la revisión a la baja que también impuso al rating de España el pasado 5 de diciembre, debido a la crisis de deuda que afecta a Europa.
La agencia resolverá los procesos de los bancos en las cuatro semanas posteriores a la publicación de su decisión sobre la revisión de la nota de la deuda soberana española.
Recapitalización
El sector financiero ha sido uno de los más golpeados: la banca europea necesita recapitalizar 114.700 millones de euros para hacer frente a la crisis (unos US$ 154.000 millones), de acuerdo con lo informado por la Autoridad Bancaria Europea (EBA). La cifra está muy por encima de los 106.000 millones de euros anunciados en octubre pasado.
De ese monto, consigna Expansión, el 26,1% corresponde a los bancos griegos (30.000 millones de euros); 22,8% a los bancos españoles (26.200 millones de euros); 13,4% a los italianos (15.400 millones de euros); 11,4% a los alemanes (13.100 millones de euros); 6,3% a los bancos franceses (7.300 millones de euros); 5,5% los belgas (6.300 millones de euros); y 3,4% los austríacos (3.900 millones de euros).
Todas las entidades financieras bancarias tienen plazo hasta el 20 de enero del próximo año para presentar planes de recapitalización.
A finales de octubre de este año, la Unión Europea aprobó elevar las exigencias de capital de máxima calidad (Tier 1) para la gran banca europea, hasta un índice de solvencia del 9% frente a los activos de riesgo antes de julio de 2012.