Los precios al consumidor en Estados Unidos subieron en junio, marcando probablemente el inicio de una aceleración de la inflación inducida por los aranceles que se esperaba desde hace tiempo y que ha mantenido a la Reserva Federal cauta a la hora de reanudar sus recortes de las tasas de interés.
El Índice de Precios al Consumidor (IPC) aumentó un 0,3% el mes pasado, tras subir un 0,1% en mayo, según informó el martes la Oficina de Estadísticas Laborales del Departamento de Trabajo. Fue su mayor alza desde enero. En los 12 meses hasta junio, el IPC avanzó un 2,7%, tras subir un 2,4% en mayo.
Los economistas consultados por Reuters esperaban un incremento mensual del 0,3% y del 2,6% en términos interanuales.
Las lecturas inflacionarias se situaron en el lado bajo entre febrero y mayo, lo que llevó al presidente Donald Trump a exigir a la Fed una reducción de los costos de endeudamiento.
Inflación tardó en responder a aranceles
Los economistas dijeron que la inflación tardó en responder a los amplios aranceles a la importación anunciados por Trump en abril porque las empresas aún estaban vendiendo existencias acumuladas antes de que los aranceles entraran en vigor.
Trump anunció la semana pasada la entrada en vigor el 1 de agosto de gravámenes más altos para las importaciones procedentes de países como México, Japón, Canadá y Brasil, así como de la Unión Europea, elevando la tasa arancelaria efectiva. Los economistas prevén que el alza de los precios de los bienes se mantenga durante el verano boreal.
Excluyendo los volátiles componentes alimentario y energético, el IPC subió un 0,2% en junio, tras el 0,1% del mes anterior. En los 12 meses transcurridos hasta junio, la inflación subyacente se incrementó en un 2,9%, tras haber avanzado un 2,8% durante tres meses consecutivos.
Sin embargo, la fuerte subida de los precios de los bienes podría verse compensada en cierta medida por el moderado aumento de los costos de los servicios, y aliviar la preocupación por un crecimiento generalizado de las presiones inflacionistas. La débil demanda ha limitado las subidas de precios de categorías relacionadas con los servicios, como las tarifas aéreas y las habitaciones de hotel y motel.
La Fed realiza un seguimiento de distintas medidas de inflación para alcanzar su objetivo del 2%. Se espera que mantenga su tasa de referencia a un día entre el 4,25%-4,5% en la reunión de política monetaria que se celebrará a fines de mes.