El presidente Donald Trump afirmó que EEUU se encuentra enfrascado en una guerra comercial con China, incluso cuando el secretario del Tesoro, Scott Bessent, propuso una pausa más prolongada en los altos aranceles a los productos chinos para resolver el conflicto sobre minerales críticos.
Luego de que un periodista le preguntara si las dos mayores economías del mundo podrían verse envueltas en una guerra comercial prolongada si no alcanzan un acuerdo el mandatario señaló: “Bueno, ya estamos en una (...) Tenemos un arancel de 100%. Si no tuviéramos aranceles, quedaríamos expuestos como si no fuéramos nada”.
Trump habló pocas horas después de que Bessent insinuara la posibilidad de extender por más de tres meses la suspensión de los derechos de importación a productos chinos, si Beijing detiene su plan de imponer estrictos nuevos controles a las exportaciones de tierras raras. Desde comienzos de este año, ambos países han acordado una serie de treguas de 90 días, con la próxima fecha límite en noviembre.
“¿Es posible que avancemos hacia una extensión más larga a cambio? Tal vez. Pero todo eso se negociará en las próximas semanas”, dijo Bessent durante una conferencia de prensa en Washington.
Las declaraciones contrapuestas reflejaron la volatilidad que enfrentan los inversionistas ante el aumento de tensiones entre Washington y Beijing. Las acciones en EEUU ampliaron sus ganancias tras las palabras de Bessent, mientras que los comentarios de Trump se conocieron después del cierre del mercado en Nueva York.