Por Catalina González S.
Desde el nacimiento de Internet, las compañías de entretenimiento han buscado formas de rentabilizar sus negocios a través de la web, pero sin obtener los resultados esperados. La unidad interactiva del gigante Walt Disney ha perdido dinero por 12 trimestres consecutivos.
Sin embargo, Funny Or Die (FOR), la compañía fundada por el actor de comedia estadounidense Will Ferrell está marcando el camino para las empresas de este tipo, combinando las bases de un emprendimiento de Internet con una lista de talentos top para atraer visitantes, lo que le permitiría obtener cerca de US$ 30 millones en ingresos este año. ¿Cómo logró hacer lo que ni el imperio Disney pudo?
Lo que comenzó como una broma de Ferrel y su compañero guionista Adam McKay, a principios de 2007, donde la hija de este último aparecía en un video de dos minutos en la casa de Ferrell, se convirtió en un fenómeno. “The Landlord” atrajo más de 78 millones de visitas, generando un tráfico que hoy le permite tener 11,7 millones de usuarios únicos mensuales. Con el alto nivel de público vino el dinero. Las marcas comenzaron a comprar avisos en el sitio, y una serie de estudios incluso contrató a FOR para que crearan videos para las estrellas de las películas que lanzarían más adelante.
El éxito atrajo además a la firma de capital de riesgo Sequoia Capital que puso
US$ 15 millones en la compañía. Más tarde, en 2008, el canal HBO invirtió comprando una participación de menos de 10%, para que produjeran al menos 10 programas de media hora y organizaran tours de comedia juntos.
“Alguien va a descubrir la manera de unir los medios tradicionales a este modelo de nuevos medios, para la forma en que la gente está consumiendo contenidos ahora, en una escala masiva”, aseguró en una entrevista el director ejecutivo de Funny Or Die, Dick Glover. “Nosotros lo estamos haciendo en nuestro pequeño mundo. Nos está yendo OK”.
Fórmula fallida
El caso es muy distinto para otras empresas. Disney ha fallado en replicar el modelo. Su unidad interactiva ha acumulado pérdidas por más de US$ 300 millones.
En noviembre pasado anunció una asociación con YouTube, de Google, para crear videos familiares cortos. Este popular sitio, también está invirtiendo cerca de US$ 100 millones para agregar canales en colaboración con celebridades como Amy Poehler, de SNL, Ashton Kutcher y la antigua estrella de baloncesto Shaquille O’ Neal.