El secretario del Tesoro de EE.UU., Timothy Geithner, dijo hoy
que su gobierno debe retirar la garantía implícita que permite el rescate de las
grandes entidades financieras si entran en problemas, con la creación de un
sistema para desmantelarlas.
Con esto, Geithner defendió cambios en la normativa que darán más poder al gobierno
para intervenir y vender o reestructurar entidades al borde de la quiebra.
"Ningún sistema financiero puede operar eficientemente si las
instituciones financieras y los inversores asumen que el gobierno les protegerá
de las consecuencias del fracaso", dijo el secretario.
Además destacó que en las últimas décadas esas entidades han crecido y
acumulado más deuda porque se benefician de la percepción de que el gobierno no
puede permitir que se hundan.
Para romper esa dinámica, el gobierno y el presidente del Comité de Servicios
Financieros de la Cámara
Baja, el demócrata Barney Frank, elaboraron una propuesta para desmantelar grandes empresas financieras, más
flexible y rápida que lo establecido por el sistema de bancarrotas.
El proyecto de ley prevé que cuando un gigante de Wall Street esté a punto de
hundirse sean sus rivales y no los contribuyentes los que paguen por su
intervención.
Igualmente, el proyecto prevé dar a las autoridades más poder para vigilar e
intervenir las entidades financieras que suponen un riesgo para el sistema por
su gran tamaño.