El ministro de Trabajo griego, Yorgos Kutrumanis, descartó hoy reducir el salario mínimo como exige la "troika internacional", compuesta por expertos de la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional.
El salario mínimo en Grecia es de US$ 1.004 y la "troika", que hoy inicio una nueva ronda de negociaciones en Atenas, exige que sea reducido hasta el nivel de Portugal, donde es de US$ 602.
Tras una reunión con el primer ministro, Lukás Papadimos, que siguió a su reunión con los representantes de la "troika", Kutrumanis dijo a la prensa que esa medida "está fuera de toda discusión".
La misión multilateral también exigió la abolición del acuerdo entre patronal y sindicatos del pasado verano, que prevé respetar el salario mínimo y contempla además subidas salariales del 1,5% en julio de 2011 y del 1,7% en 2012, inferior a la inflación, que ronda el 3% en Grecia.
Los expertos también proponen que se rebajen los costos no laborales del trabajo, con un recorte "drástico" de la participación empresarial en los fondos de pensiones, que sería compensado con un nuevo recorte de pensiones para no desequilibrar las arcas de la Seguridad Social.
El ministro de Finanzas, Evangelos Venizelos, se entrevistó hoy con la "troika", además de con Papadimos y con el director del Instituto Internacional de Finanzas, Charles Dalaras, que representa a los grandes acreedores bancarios de Grecia.
Este encuentro sirve para avanzar en las negociaciones para el descuento de 50% de la deuda griega en manos de bancos y grandes fondos de inversión, cada vez más reacios a participar en el proceso.