Las ventas de casas de segunda mano cayeron por octava vez en los últimos nueve meses, con un inventario de viviendas unifamiliares sin vender subiendo a su nivel más alto en dos décadas.
La Asociación de Corredores de Bienes Raíces afirmó que la venta de casas usadas cayó 1% a 4,89 millones de unidades, alcanzando el mínimo histórico de enero.
El precio medio de una casa cayó 8%, en comparación al año pasado, llegando a US$ 202.300. Los analistas prevén que las bajas continuen, dado el enorme inventario de viviendas unifamiliares sin vender, que subieron en abril a 10,7 meses de abastecimiento al ritmo de ventas actual, el mayor nivel de los inventarios desde junio de 1985.
Sin embargo, la caída de abril fue ligeramente menor a lo esperado. La industria de la vivienda ha sido fuertemente golpeada por una depresión que ha visto bajar las ventas y los precios mientras aumentan los embargos por hipotecas impagas, tras cinco años de boom inmobiliario.